Tomás Izquierdo,
cubano de 52 años, lleva 40 sin dormir y los 27 médicos que le han tratado creen que se trata de un caso único en el mundo. El enfermo, que se relaja con sesiones de hipnosis, atribuye esta vigilia a su obsesión por evitar las pesadillas que sufrió tras una desafortunada operación de amígdalas a los 12 años, que le llevaron a no querer volver a dormir....
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cubano de 52 años, lleva 40 sin dormir y los 27 médicos que le han tratado creen que se trata de un caso único en el mundo. El enfermo, que se relaja con sesiones de hipnosis, atribuye esta vigilia a su obsesión por evitar las pesadillas que sufrió tras una desafortunada operación de amígdalas a los 12 años, que le llevaron a no querer volver a dormir.