Jane Fonda protagoniza la serie 'fabricante de muñecas', que se estrena hoy en TVE-1

Desde que en 1971 Jane Fonda leyera Fabricante de muñecas, novela escrita por Harriette Arnow en 1954 (y la que fundó su prestigio literario), la idea de interpretar a la heroína, la íntegra y valerosa Gertie Nevels, permaneció obsesivamente en su cabeza. La tenacidad de que siempre ha hecho gala la actriz norteamericana dio sus frutos en 1979, fecha en la que, con su segundo oscar recién ganado debajo del brazo, logró convencer a los ejecutivos de la ABC para intervenir en el proyecto. Es verdad que aún habrá dilaciones, pero nada que pueda con la obstinación de Jane Fonda, convencida ésta, a...

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Desde que en 1971 Jane Fonda leyera Fabricante de muñecas, novela escrita por Harriette Arnow en 1954 (y la que fundó su prestigio literario), la idea de interpretar a la heroína, la íntegra y valerosa Gertie Nevels, permaneció obsesivamente en su cabeza. La tenacidad de que siempre ha hecho gala la actriz norteamericana dio sus frutos en 1979, fecha en la que, con su segundo oscar recién ganado debajo del brazo, logró convencer a los ejecutivos de la ABC para intervenir en el proyecto. Es verdad que aún habrá dilaciones, pero nada que pueda con la obstinación de Jane Fonda, convencida ésta, además, de que "si ella no hacía el filme no lo haría nadie".

Por fin, en 1983, participando en la producción con su propia compañía (en la que es su socio Bruce Gilbert), IPC Films, el viejo y acariciado proyecto comienza a ser una realidad. Fabricantes de muñecas es la última parte de la trilogía (Mountain Path y Hunter's horn la preceden) que Harriette Arnow (1908, Wayne County) ambienta en su tierra natal, Kentucky. Son cinco generaciones de antepasados establecidos en esa zona montañosa, las historias transmitidas de generación en generación y las propias vivencias de la autora en la granja de sus padres (maestros también) Ia materia sobre la que establece su personal recorte mental del mundo.Una visión sombría y aun trágica de la historia de América que trasciende ese primer plano regionalista. Un mundo en el que los hombres ven truncados sus sueños y socavadas su dignidad y libertad personal ante el avance de la voraz y depredadora sociedad industrial, que en nombre de la civilización ha transgredido el pacto con la naturaleza y está cavando su propia tumba. Es cierto que -piensa Arnow- frente a la sociedad urbana, degradada, quedan aún en el ámbito rural gentes íntegras y con sentido de la dignidad personal, pero -y es aquí donde ,se justifica el carácter de legítima tragedia que se le ha dado a Fabricante de muñecas-el proceso de destrucción terminará por sumergirlo todo. Es la misma visión pesimista que tiene Gertie Nevels al final de la novela, la historia de una mujer de la montaña de Kentucky y de su familia, trasplantados desde sus queridas tierras natales a una gran ciudad industrial en 1944, en los difíciles tiempos de la Segunda Guerra Mundial.

Final deprimente

Gertie lucha denodadamente para mantener la integridad física y moral de los suyos en el ambiente adverso que le ha tocado vivir en Detroit. Pero la dura experiencia acaba con algunos de sus sueños. De .algún modo, desde la lucidez acerca de los fundamentos de su propia existencia, se resigna, ante el horror del mundo en el que ella vive ahora. Un final, como se ve, un tanto deprimente (y que sigue sorprendiendo a una parte de los críticos de la obra de Arnow, por "poco adecuado, incongruente") que Jane Fonda y su equipo de guionistas cambiaron sustancialmente.En la adaptación televisiva ese lúgubre futuro que se abre a los ojos de Gertie se ilumina repentinamente con la providencial llegada de un marchante que, reconociendo su talento artístico, se compromete a comprarle todas las tallas que vaya esculpiendo. Con el dinero ahorrado podrá volver a su querido Kentucky y comprar la anhelada granja.

Fidelidad al original

Fuera de esta alteración, la intención de los guionistas, el veterano actor Hume Cronyn y la escritora Susan Cooper, fue la de mantener se firmemente pegados a la letra del original. Para ambos ésta era su primera experiencia televisiva y la oportunidad de responder al desafío de condensar en tres horas de filmación la enorme cantidad de material contenido en Fabricante de muñecas (Millard Lampell había realizado una primera versión que no satisfizo a Jane Fonda quien tenía su propia y firme idea. sobre el asunto). De hecho, una de las razones que decidieron a la actriz y productora de Fabricante de muñecas a abandonar su elitista desdén por el -medio televisivo fue -según cuenta ella misma- el fracaso de varios guionistas en la tarea de comprimir las 600 páginas de la novela a la duración estándar de un largometraje cinematográfico.También Jane Fonda sucumbió al encantamiento de la pequeña pantalla, un secreto a voces: "Cuando haces televisión, tienes oportunidades que no se tienen en ninguna otra parte, y una de ellas es llegar a una gran masa de gente". Conocida la convicción que la actriz norteamericana pone en todos sus trabajos, es fácil imaginar su aplicación a la hora de recrear el personaje de Gertie Nevels. Un personaje que -en su opinión- estaba muy lejos de todo lo interpretado por ella con anterioridad, pero con el que se identificó plenamente. Todo esfuerzo fue poco para meterse en la piel de esa mujer de Kentucky. Durante un temporada estuvo conviviendo con familia de granjeros de Arkansas y Kentucky (gente que encontró a través de Dolly Parton) y compartiendo sus trabajos. Con idéntica intención de dotar de autenticidad a su trabajo se dedicó a estudiar el acento de la región, siguiendo las instrucciones del especialista en el tema Bob Easton (conocido por haber trabajado también con otros actores), "capaz de distinguir las sutiles diferencias entre el acento de Kentucky y el de Tennessee". La trabajosa transcripción fonética de todo el guión y las prácticas lingüísticas realizadas por la actriz mientras buscaba localizaciones para el rodaje (Chicago y Tennessee) dieron, sin embargo, un resultado no siempre bien recibido por la crítica. La propia Jane Fonda reconoce que "no es buena con los acentos".

Premio Emy

Daniel Petrie, forjado como realizador en el medio televisivo (ha dirigido episodios de las series Los defensores, Marcus Welby, Centro médico, McMillan y Sra., etcétera) y disfrutando generalmente del aplauso de la crítica y del público (consiguió el Premio Emmy por su telefilme Eleanor Franklin en la Casa Blanca), se encargó, con su innegable oficio, de llevar a buen puerto esta primera producción televisiva de Jane Fonda. Contó para ello con un buen plantel de actores, entre los que cabría destacar a Levon Helín (Clovis, el marido de Gertie) y a Geraldine Page, que interpreta a uno de los excéntricos personajes a los que parece estar abonada.Fabricante de muñecas se emite hoy a las 21.40 horas por TVE-1.

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