Dramática despedida de Yiyo.

El torero Yiyo, muerto por el toro Burlero en la corrida celebrada el viernes en Colmenar, fue despedido ayer por una multitud en la plaza de Las Ventas, donde, a las cinco en punto de la tarde, el féretro con los restos del diestro dio la vuelta al ruedo a hombros de toreros y aficionados en medio de gran sobrecogimiento. Después lo llevaron hasta el cementerio madrileño de la Almudena, donde el joven diestro fue enterrado a la misma hora en que otra noticia conmovía al mundo taurino: Antoñete había sufrido una cogida de pronóstico reservado en la plaza de Almería. Poco más tarde la tr...

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El torero Yiyo, muerto por el toro Burlero en la corrida celebrada el viernes en Colmenar, fue despedido ayer por una multitud en la plaza de Las Ventas, donde, a las cinco en punto de la tarde, el féretro con los restos del diestro dio la vuelta al ruedo a hombros de toreros y aficionados en medio de gran sobrecogimiento. Después lo llevaron hasta el cementerio madrileño de la Almudena, donde el joven diestro fue enterrado a la misma hora en que otra noticia conmovía al mundo taurino: Antoñete había sufrido una cogida de pronóstico reservado en la plaza de Almería. Poco más tarde la tragedia de Colmenar estuvo a punto de repetirse en la corrida de San Sebastián de los Reyes cuando el sexto toro empitonó a El Soro por el pecho al entrar a matar. El horrorizado público asistía minutos después a un desenlace jubiloso, exactamente opuesto al de Colmenar: el torero, inexplicablemente ileso, salía a hombros por la puerta grande. Páginas 34 a 37

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