GENTE

Francisco Vela Cabeza de Vaca,

ciudadano de Chiciana de la Frontera (Cádiz), fue víctima, junto con otras dos personas, de un comprensible caso de insolidaridad, al quedarse encerrados en el cementerio de su población. La hora de cierre de¡ laberíntico camposanto sorprendió a Francisco y a las dos mujeres que le acompañaban, Sus gritos pidiendo auxilio sólo conseguían ahuyentar a los transeúntes que circulaban al otro lado de la valla del cementerio. Con el anochecer, sus gritos de socorro se crispaban con la misma intensidad que aumentaba la velocidad de huida de los peatones que caminaban cerca del cementerio. A las tres ...

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ciudadano de Chiciana de la Frontera (Cádiz), fue víctima, junto con otras dos personas, de un comprensible caso de insolidaridad, al quedarse encerrados en el cementerio de su población. La hora de cierre de¡ laberíntico camposanto sorprendió a Francisco y a las dos mujeres que le acompañaban, Sus gritos pidiendo auxilio sólo conseguían ahuyentar a los transeúntes que circulaban al otro lado de la valla del cementerio. Con el anochecer, sus gritos de socorro se crispaban con la misma intensidad que aumentaba la velocidad de huida de los peatones que caminaban cerca del cementerio. A las tres horas, un conductor se atrevió a alumbrar la verja del misterioso recinto, conriprobando el singular encierro. Tras el oportuno aviso fue posible su liberación.

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