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Vicente Martínez,

El Levantino, matador de toros, recorre estos días Madrid, vestido de luces, para llamar la atención sobre la puesta en marcha de la escuela taurina de Molina de Segura (Murcia), que, tras permanecer dos años cerrada, por problemas legales y económicos, será abierta, por intervención del rey Juan Carlos I. Agradecido, El Levantino quiere regalar al príncipe Felipe un capote, una muleta y una espada de madera con una dedicatoria, pero pretende entregar personalmente el obsequio al Rey o al Príncipe, para lo que ha solicitado audiencia y piensa pasearse, vestido de luces, po...

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El Levantino, matador de toros, recorre estos días Madrid, vestido de luces, para llamar la atención sobre la puesta en marcha de la escuela taurina de Molina de Segura (Murcia), que, tras permanecer dos años cerrada, por problemas legales y económicos, será abierta, por intervención del rey Juan Carlos I. Agradecido, El Levantino quiere regalar al príncipe Felipe un capote, una muleta y una espada de madera con una dedicatoria, pero pretende entregar personalmente el obsequio al Rey o al Príncipe, para lo que ha solicitado audiencia y piensa pasearse, vestido de luces, por las proximidades de La Zarzuela.

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