Crítica:

Una obra de Lauro Olmo en 'Teatro'

Esta noche, por la primera cadena, se emite un programa teatral con La pechuga de la sardina, obra del dramaturgo gallego, afincado en Madrid, Lauro Olmo. Este drama fue estrenado en Madrid en 1963 y constituyó, frente al éxito de una obra, anterior de Olmo, La camisa, un relativo fracaso.Tanto La camisa como La pechuga de la sardina son partes de un esfuerzo de Lauro Olmo por incorporar al teatro de la generación llamada realista las tendencias del teatro popular interrumpidas por la guerra y sofocadas en la posguerra que, en parte, cristalizaron en los sain...

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Esta noche, por la primera cadena, se emite un programa teatral con La pechuga de la sardina, obra del dramaturgo gallego, afincado en Madrid, Lauro Olmo. Este drama fue estrenado en Madrid en 1963 y constituyó, frente al éxito de una obra, anterior de Olmo, La camisa, un relativo fracaso.Tanto La camisa como La pechuga de la sardina son partes de un esfuerzo de Lauro Olmo por incorporar al teatro de la generación llamada realista las tendencias del teatro popular interrumpidas por la guerra y sofocadas en la posguerra que, en parte, cristalizaron en los sainetes y, en parte, en el drama social naturalista del primer tercio de siglo.

Otras obras de esta época de Lauro Olmo son El cuerpo, English Spoken y El cuarto poder. En todas ellas se plantean problemas y situaciones en los que se observa un crudo reflejo de la opresión franquista sobre las zonas más pobres de la sociedad española y que, por ello, constituyen un documento importante para conocer y situar el estado de la clase obrera durante la dictadura.

Pero el mérito mayor de este cuerpo dramático es, probablemente, el cambio de lenguaje que Lauro Olmo llevó al algo críptico idioma de los más destacados dramaturgos de esta generación, que tuvieron que sortear las agresiones de la censura con la oscuridad y el entrelineado. Frente a ellos, Olmo extrajo de las tradiciones del teatro popular español, y sobre todo madrileño, formas de expresión diáfanas, en las que el rechazo de la situación política española gravitaba más en los climas y aspectos sensoriales del juego dramático y tragicómico que en el despliegue ideológico.

Tipos y situaciones inmediatamente reconocibles, desarrolladas con gran limpieza y austeridad, hicieron que Olmo diera con estas obras una nueva opción, dentro de las muy escasas con que contaba el teatro de izquierda español durante una época de extremas dificultades para estrenar y capturar públicos.

Teatro se emite esta noche a las 21.35 por la primera cadena.

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