Dalí reapareció con una excéntrica conferencia de Prensa
«Ya estoy aquí», dijo Salvador Dalí, emulando el célebre saludo del honorable Tarradellas, para abrir su excéntrica y espectacular conferencia de Prensa ofrecida ayer tarde por el pintor en Figueras. «Seré tan breve que ya he terminado», añadió.El pintor surrealista se presentó en el escenario del museo que lleva su nombre, tocado de barretina, vestido con abrigo de leopardo y cogido del brazo de su esposa, Gala, mientras se oían acordes musicales de Wagner y su musa repartía nardos al centenar de periodistas y fotógrafos congregados.
La conferencia no aclaró las especulaciones sobre la...
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«Ya estoy aquí», dijo Salvador Dalí, emulando el célebre saludo del honorable Tarradellas, para abrir su excéntrica y espectacular conferencia de Prensa ofrecida ayer tarde por el pintor en Figueras. «Seré tan breve que ya he terminado», añadió.El pintor surrealista se presentó en el escenario del museo que lleva su nombre, tocado de barretina, vestido con abrigo de leopardo y cogido del brazo de su esposa, Gala, mientras se oían acordes musicales de Wagner y su musa repartía nardos al centenar de periodistas y fotógrafos congregados.
La conferencia no aclaró las especulaciones sobre la crítica situación económica personal y de su patrimonio artístico. Su secretario, Fernando Sabater, hizo de maestro de ceremonias. Dalí evitó las preguntas comprometidas, pero aplaudió sus propias respuestas. Se reafirmó en sus creencias políticorreliglosas y en la intención de volver a casarse con Gala por indicación de un obispo.
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