Al Betis le basta con dos chispazos ante el Lyon

El Betis alcanzó los ocho puntos en la liguilla de la Europa League con un convincente triunfo ante el Lyon, uno de los rivales más poderosos que tenía que pasar por Sevilla. La euforia, en cierta medida, está desatada en esta afición que ve cómo su equipo gana en la Liga y en Europa. Y lo hace, lo que es un gran síntoma, con aparente facilidad. Es lo que proporciona tener una plantilla bastante equilibrada, con una línea de jugadores en la mediapunta de mucha clase, distinción y gol. Ante el Lyon, al Betis le bastó con dos chispazos en el primer acto, donde se desató su fútbol vertical y su pegada, para acabar con un Lyon que venía invicto y sin encajar ni un solo gol en la competición. Futbolistas como Antony, Lo Celso o Abde, bien respaldados por sus compañeros, se merendaron al sexto clasificado de la Liga francesa en un suspiro. El Betis aspira a llegar muy lejos en esta Liga Europa.

No pasaba nada en La Cartuja digno de reseñar. El choque se movía con cierta sosería. El Betis había hecho algunos cambios en su once inicial ante un Lyon plagado de suplentes, con el casillero de puntos lleno después de su pleno de tres victorias en las tres jornadas disputadas. Tocaba y tocaba el conjunto francés, descendido en verano por problemas financieros y recuperado para la causa. Es, no obstante, un grande del fútbol francés que fue sometido a una descarga eléctrica. Avisó Abde con una gran jugada frustrada por la gran parada de Greif. A la salida del saque de esquina, el propio Abde embocó y marcó ante la debilidad de la zaga francesa. Cinco minutos después, Marc Roca dejaba en evidencia a la defensa gala con una falta al hueco desde su campo. Irrumpió Antony en velocidad y tuvo tiempo de hacerle una vaselina a Greif. En cinco minutos, este Betis tan poderoso y de gran pegada se había puesto 2-0.

El Lyon lo intentó en el segundo acto, con escasa fortuna. Futbolistas como Moreira le dieron más empuje, pero apenas le hizo daño al Betis, muy bien colocado. Manuel Pellegrini, de nuevo aclamado por la grada mientras se gestiona su renovación, pues acaba contrato en el mes de junio, dio entrada a jugadores menos habituales y hasta se reclamó un penalti que pareció bastante claro sobre Fornals. No lo concedió el VAR y así, en un suspiro, como ganó el Betis, se llegó al final del partido.