Fabrice Pastor: “El Sevilla tiene potencial para codearse con el Madrid y el Barcelona”
El empresario rival de Al-Khelaifi por el control del pádel mundial tiene decidido entrar en el accionariado del club andaluz y poner fin a la guerra por el poder del equipo hispalense
A Fabrice Pastor hay tres cosas que le ilusionan especialmente. El pádel, la ciudad de Sevilla y el Sevilla. Empresario nacido en 1971 y perteneciente a una de las familias más importantes y pudientes de Mónaco, su trayectoria alterna el mundo de la construcción, el pádel y el fútbol. Su padre, Michel Pastor, fue el presidente del Mónaco que llegó a la final de la Champions en 2004 después de eliminar al Madrid en los cuartos de final. El Madrid de Ronaldo, Zidane, Figo,...
A Fabrice Pastor hay tres cosas que le ilusionan especialmente. El pádel, la ciudad de Sevilla y el Sevilla. Empresario nacido en 1971 y perteneciente a una de las familias más importantes y pudientes de Mónaco, su trayectoria alterna el mundo de la construcción, el pádel y el fútbol. Su padre, Michel Pastor, fue el presidente del Mónaco que llegó a la final de la Champions en 2004 después de eliminar al Madrid en los cuartos de final. El Madrid de Ronaldo, Zidane, Figo, Roberto Carlos, Raúl o David Beckham. Es el propietario del circuito profesional A1 Pádel, que recientemente ha organizado el Máster de Sevilla. Una idea global que se gestó hace tres años en México y que ahora tiene como socios, entre otros, a Yankee Global Enterprises, la empresa propietaria del equipo de béisbol New York Yankees. Hay quien afirma que posee más de 3.000 pisos en propiedad solo en la capital de Andalucía, donde tiene residencia y en donde ha decidido emprender un nuevo proyecto: entrar en el accionariado del Sevilla. Todo ello mientras recorre ciudades por todo el mundo en competencia con Nasser Al-Khelaifi, dueño del PSG, por el control del pádel mundial, dividido en dos grandes circuitos.
“Me enamoré de Sevilla hace 31 años, cuando la visité por la Feria de Abril. Sevilla necesita cariño. Hay que quererla más y de otra manera. Es una pequeña Roma, lo tiene todo”, aclara Pastor en un impecable castellano. Sin embargo, se le endurece algo el rostro cuando se le pone por delante el nombre de Nasser Al-Khelaifi. “Su actitud me parece poco inteligente y poco responsable. Di doce meses para poder sentarnos y arreglar la división del mundo del pádel. Es una responsabilidad que tenemos con nuestros aficionados”, aclara. “Y en cuanto a su gestión en el mundo del fútbol, siempre pienso en lo que pasó en el vestuario del Madrid con el PSG en un partido de Champions para definir qué tipo de persona es. Fue dramático. Entró con su director deportivo para decirles a todos que les iba a cortar la cabeza. Se ha gastado 16.000 millones de euros y no ha ganado la Champions. Un buen gestor en el mundo del fútbol es Florentino Pérez”, asevera Pastor, quien fuera socio del club de pádel donde José María Aznar, entonces presidente del Gobierno, jugaba y daba a conocer este deporte al gran público.
“Quiero lograr el circuito único y ser el Bernie Ecclestone del pádel. No tengo ninguna duda de que lo voy a conseguir. En tres años hemos logrado algo increíble y tengo el apoyo de las televisiones y de importantes empresas”, admite sin tapujos en la tienda de pádel que tiene en Sevilla. A Pastor le van los retos. Su empresa logró, entre otras cosas, robarle siete hectáreas de tierra al mar en Mónaco para la construcción. Y alguno de esos retos van más allá del negocio y tocan ciertos aspectos sentimentales. Fue jugador de pádel y ahora tiene un circuito mundial de este deporte. Ama Sevilla y participa de todas sus tradiciones, como la Semana Santa y la Feria. Y también ama al Sevilla FC.
“Sí, tengo pensado entrar en accionariado del Sevilla, pero todavía no es el momento. No podría ser presidente porque no vivo en España y fiscalmente no resido aquí, pero entraría con fuerza para llevar el control del club. Le tengo un enorme respeto al Sevilla y, sobre todo, a la afición. Hay que hacer las cosas bien”, aclara Pastor. La situación accionarial del Sevilla es un volcán. El presidente, José María del Nido Carrasco, mantiene una guerra total con José María del Nido Benavente, su padre y máximo accionista de una entidad dominada por tres grandes accionistas (Sevillistas de Nervión, familia Carrión y familia Del Nido) que mantienen un pacto para la gobernabilidad del Sevilla que Del Nido padre no respeta. Curiosamente, tanto el hijo como el padre se vieron con Pastor durante la celebración del Máster de Sevilla de Pádel. El empresario, respetuoso, no desvela nada. Sin embargo, las conversaciones para una posible venta del Sevilla sí se han producido. Con los Del Nido y con el resto de los máximos accionistas.
“El Sevilla necesita un proyecto de trabajo. Eso requiere su tiempo. Yo creo que el actual presidente, joven y con ideas, necesita ese tiempo. Y también creo que los gestores del Sevilla quieren vender sus acciones”, aclara, buen conocedor de la situación accionarial de la entidad. Su plan a medio plazo sería el de hacerse con el control de la entidad y colocar al frente a alguien de su confianza. “El sevillismo ve en mí tranquilidad. Hay que trabajar bien para que el Sevilla vuelva a ser lo que fue hace nada, uno de los mejores clubes de Europa. La actual guerra no beneficia a nadie, todo el mundo sale perdiendo y se observan malos comportamientos en el palco y las juntas de accionistas. Estoy convencido de que el Sevilla, con trabajo, tiempo y un buen proyecto, puede codearse con el Madrid y el Barcelona para ganar la Liga”, aclara.
Fuentes consultadas por este periódico destacan que la idea de Pastor es entrar en el accionariado del Sevilla en un año, mientras se calman las aguas en el club. Un tiempo también en el que espera consolidar más todavía su circuito mundial de pádel. Por su mente se dibuja un Sevilla bien estructurado con nombres propios como los de Marcelo Gallardo, un técnico por el que Pastor siente predilección. Tiene también muy presente la gestión que su padre hizo con el Mónaco. “Hemos estado 11 partidos sin perder. Estamos haciendo una gran temporada”, admite este empresario multimillonario al que le une también una estrecha relación con la Casa Real de Mónaco. “Nuestro Máster de pádel de Montecarlo tendrá un palco principesco, así que tendré que pedirle permiso a Alberto para poder estar en el palco de mi torneo”, bromea Pastor, quien fue premiado en Sevilla el jueves de la semana pasada como el mejor empresario del año por el Círculo Mercantil de la capital de Andalucía. Y es que Sevilla le duele. “No puede ser que cuando aterrizo en Málaga siento que lo hago en Nueva York y cuando lo hago en Sevilla me recuerde a África. Hay que mejorar el aeropuerto de la capital de Andalucía”, proclama.