Un Barcelona insaciable ya es tricampeón tras una goleada histórica a la Real en la final de Copa
Las azulgrana, ganadoras de Liga y Supercopa, someten al equipo donostiarra con una superioridad abrumadora y encaran el gran reto de derrotar al Lyon en la Champions el próximo sábado para lograr un póquer inédito
El Barcelona, un equipo de época con un hambre insaciable, recuperó este sábado en La Romareda el único gran trono nacional que le faltaba. Las azulgrana arrollaron a la Real Sociedad en una tarde soleada en la que bordaron el fútbol para levantar su décima Copa de la Reina. La goleada y el dominio fueron tan, tan avasalladores que el encuentro se quedó a la media hora sin más trama que descubrir cuántos tantos iba a ...
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El Barcelona, un equipo de época con un hambre insaciable, recuperó este sábado en La Romareda el único gran trono nacional que le faltaba. Las azulgrana arrollaron a la Real Sociedad en una tarde soleada en la que bordaron el fútbol para levantar su décima Copa de la Reina. La goleada y el dominio fueron tan, tan avasalladores que el encuentro se quedó a la media hora sin más trama que descubrir cuántos tantos iba a anotar el Barça. Ona Batlle marcó el primero en el minuto 5 tras recibir un pase entre líneas de Claudia Pina. Batlle, la lateral izquierda, puso un centro raso, pero una pifia de Vanegas en el despeje le dejó el cuero franco. En cuanto se estrenó el marcador, la Real se descompuso. Las txuriurdin, que habían perdido los dos choques anteriores contra las catalanas con un parcial de diez goles a uno, no fueron capaces de plantear una alternativa a un rival tan superior que monopolizó el balón y el partido de principio a fin y le endosó una de las mayores goleadas de la historia en una final de un torneo nacional. Después de haber conquistado Liga y Supercopa, el conjunto dirigido por Jonatan Giráldez celebra ya un triplete a falta de pelear el próximo sábado la Champions ante el Lyon en San Mamés, donde puede alzar un póquer histórico —nunca un club español lo ha hecho— como broche a una temporada que sería perfecta.
El partido fue tan plácido para el Barça que ni siquiera Sandra Paños, que dejará el club a final de temporada tras nueve años y un currículum fabuloso, tuvo que hacer una parada. La guardameta se despidió en una final —probablemente jugará Cata Coll en Bilbao— con una actuación en la que solo necesitó atrapar un par de centros laterales e intervenir en varias ocasiones con los pies para sacar de puerta o participar en la salida de balón.
El Barça protagonizó la posesión de una forma casi tiránica. El centro del campo, con Patri Guijarro, Aitana Bonmatí y Pina, combinó tan rápido y con tanto acierto que encontró siempre en posiciones ventajosas a Salma Paralluelo y a Graham Hansen en las alas y a Mariona por todo el campo para anular la defensa de cinco que propuso Natalia Arroyo. Mariona, que jugó de nueve, hizo un partido formidable —fue elegida MVP— en el que dio tres asistencias y marcó dos goles. La atacante balear se descolgó una y otra vez, tiró paredes e hizo fluir a todo el ataque del Barça. Suyo fue el centro desde la banda derecha con el que Paralluelo, de vuelta en su casa, anotó con un gran cabezazo el segundo gol.
La aragonesa estuvo a punto de marcar el tercero un instante después con un tiro desde fuera del área. Lete Para detuvo el disparo, pero el balón se quedó franco en el área pequeña y Hansen lo empujó a placer. La noruega, en una temporada fantástica, hizo también el cuarto a pase de Salma. Antes del descanso, Mariona redondeó su actuación con otra asistencia para Batlle y marcó su primer gol nada más salir de los vestuarios. En medio de una actuación coral del Barça, su recital continuó con otra asistencia para Pina y un tanto final en el minuto 58 para cerrar una goleada que por momentos tuvo un tinte cruel al revelar la diferencia de nivel entre ambos equipos y la hegemonía de las catalanas en las competiciones nacionales. El dominio azulgrana es tan apabullante en España que esta temporada ha ganado todos los partidos a excepción de un empate ante el Levante.
En la previa, Giráldez negó que el encuentro del próximo sábado ante el Lyon fuera a influir en la actitud de sus jugadoras. No lo hizo, pero sí en la alineación. El técnico gallego reservó de inicio a Keira Walsh y a Fridolina Rolfö —tuvieron minutos en la segunda parte— pensando en el choque ante las francesas y retiró a la actual Balón de Oro, Bonmatí, en el descanso —ya con cinco goles de ventaja— para dar carrete a Alexia Putellas. La capitana, tras jugar toda la segunda mitad, levantó la Copa tras recibirla de manos de la reina Letizia en un estadio en el que la afición txuriurdin se mantuvo hasta el final dando aliento a sus futbolistas en la fiesta del Barça.
El conjunto dirigido por Giráldez recobró en Zaragoza el título que se le escapó el año pasado después de quedar apeadas en los octavos por alineación indebida ante Osasuna. Desde 2020, esa ha sido la única gran concesión que ha hecho en España un equipo que domina con puño de hierro las competiciones nacionales —ha ganado cinco ligas consecutivas—, que ha alzado dos Champions (2023 y 2021) y que en una semana exacta puede cerrar el que sería el mejor curso de la historia del club si conquista por primera vez cuatro títulos.
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