Asier Villalibre liquida al Alavés con dos zarpazos

El Mallorca elimina al Tenerife en la prórroga, con un tanto de Larin

Asier Villalibre celebra su segundo tanto frente al Alavés.Miguel Toña (EFE)

Asier Villalibre liquidó al equipo al que catapultó a Primera, el Alavés, con dos zarpazos, uno en cada tiempo, y deja al Athletic en cuartos de final. Fue un trabajo aparentemente sencillo de un equipo que vuela con el viento de cola. Con la de anoche son ya 24 eliminatorias consecutivas a un partido ganadas por el equipo bilbaíno en las últimas temporadas.

No había pasado nada en ...

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Asier Villalibre liquidó al equipo al que catapultó a Primera, el Alavés, con dos zarpazos, uno en cada tiempo, y deja al Athletic en cuartos de final. Fue un trabajo aparentemente sencillo de un equipo que vuela con el viento de cola. Con la de anoche son ya 24 eliminatorias consecutivas a un partido ganadas por el equipo bilbaíno en las últimas temporadas.

No había pasado nada en San Mamés, sino cuestiones que únicamente aprecian los muy cafeteros, como el despliegue de Beñat Prados, que en un puñado de partidos que le ha dado Valverde como titular ha impartido un máster de cómo se juega de mediocentro, cuando apareció Villalibre, que juega poco, pero marca mucho, para recibir una pelota de Sancet, hacerse un pequeño lío y, cuando parecía que de allí no saldría nada, soltar un zapatazo inmisericorde, casi sin ángulo, que dejó temblando a Sivera.

Al Athletic le sale casi todo, hasta en partidos que parecen dormidos, pese al susto inicial de Hagi, que se quedó sin ángulo para rematar bien y Agirrezabala neutralizó su disparo. Luego la nada, salvo la exhibición de Prados, pasando la escoba por el medio campo. Aunque el Alavés se dejaba dominar, el Athletic no conectaba, a pesar de los esfuerzos de Sancet, que buscaba el momento de dar su pase mágico. Lo consiguió con Villalibre, que hizo el gol y animó a su equipo, más dinámico desde entonces, y que en los últimos minutos de la primera parte pudo aumentar la diferencia, sobre todo, en un balón que le puso Sancet a Berenguer de cara a Sivera, y que el navarro estrelló en el portero, o en un robo de Villalibre que buscó a Sancet, que disparó alto.

Aunque el gol llegó por la izquierda, el Athletic trabajó más la derecha, donde se desplegaba De Marcos, que, al filo del descanso, llegó hasta el fondo y centró atrás, aunque apareció Duarte como salvador. Sin tregua, otro robo de Berenguer acabó en un remate de Muniain, pero la rosca se le abrió demasiado.

Achuchó el Alavés al comienzo de la segunda mitad, en los momentos más críticos del Athletic, pero a Valverde le sale todo. Alineó a Agirrezabala, titular en la Copa, y el portero donostiarra salvó por dos veces el empate, la primera en un remate desde muy cerca de Samu, que recibió en el área pequeña, y la segunda en un disparo de Alkain, al que voló para despejar.

Pero el equipo bilbaíno parece tocado por una varita mágica. Trataba de estirarse el Alavés, cuando en una acción por la banda, Berenguer tocó en la línea de banda para De Marcos, que sin dejar bajar la pelota, colocó un pase estupendo a la cabeza de Villalibre, que tuvo tiempo para pensar a qué esquina de la portería debía poner el remate. Sivera no pudo hacer nada.

Ahí se acabó el partido, porque, aunque restaban muchos minutos, el Alavés, enfrascado en la pelea por evitar la zona baja de la Liga, se rindió definitivamente. Valverde puso en el campo a Nico Williams para que estirara las piernas, y los cambios se fueron los únicos momentos para el aplauso desde la grada. El Athletic está en cuartos y su afición es feliz, pero no solo por lo de anoche.

El Mallorca elimina al Tenerife en la prórroga (0-1)

Un gol de Larin en el minuto 120 de la prórroga le dio al Mallorca la clasificación para los cuartos de final de la Copa y dejó en la cuneta al Tenerife, el último representante de la Segunda División en el torneo copero. El choque fue muy igualado y solo en la última jugada del encuentro, cuando ya se esperaban los penaltis, el conjunto balear encontró premio a su mejor juego en la prórroga. Samu Costa, que había entrado en la segunda parte del tiempo añadido de media hora, centró al área, Gio prolongó el balón y Larin realizó un gran movimiento para batir a Tomeu Nadal con su pierna derecha. El portero del Tenerife no pudo hacer nada. Ya salvó a su equipo en la prórroga en dos grandes paradas antes disparos de Abdón Prats y Gio. El Mallorca estará en el bombo en el sorteo de este viernes.

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