El Barcelona, a semifinales, aunque el Tenerife plantó cara
El partido se decidió al final, después de una polémica falta antideportiva señalada a Guerra
El Barcelona encontró el camino para las semifinales en el último minuto de su partido ante el Tenerife, y ya tiene plaza asegurada entre los cuatro mejores de la Liga ACB. Se les fue agotando la energía a los jugadores de Vidorreta en los diez minutos finales, pero con el depósito en reserva, no dejaron de pelear hasta el último balón y estuvieron a un paso de forzar el tercer partido, un trámite del que se salvan los azulgrana.
El comienzo esperanzador del Barça, fusilando desde la línea de tres, lo replicó inmediatamente el Tenerife, jugando rápido y acertando en el tiro. Después de varias alternativas, el 21-22 al final del primer cuarto hablaba de la igualdad de fuerzas, que se inclinaron en el segundo hacia el bando local, cuando aparecieron Fitipaldo y Abromaitis. Claro que los amplios recursos del Barcelona no permitían que las diferencias se dispararan. Parker y Satoransky ejercían de bomberos en el equipo de Grimau.
Tras el descanso, el equipo azulgrana empezó a despegarse poco a poco en lo que parecía poner en peligro la estabilidad del Tenerife, pero otra reacción local, con Guy en el banquillo por la gran actuación de Salin, apretó el marcador. Estaba claro que el partido no se iba a resolver hasta el final. Era cuestión de acierto. Sastre acertó con un triple para el 92-90 a falta de 1,57m, pero replicó Satoransky para poner por delante al Barcelona. Falló Huertas su tiro, cometió una falta en ataque el Barça. Seguía la emoción porque quedaba un minuto y el Lenovo tenía la pelota, pero falló su tiro y el destino cambiaba de bando.
En la penúltima acción, Guerra se comió el amago de Vesely y cometió falta, que los árbitros interpretaron como antideportiva ante el monumental enfado de Txus Vidorreta, que veía como la eliminatoria se le desmoronaba como un castillo de naipes. La revisión de la acción no cambió la controvertida decisión de los árbitros. Vesely anotó los dos tiros con eficacia funcionarial, y en la siguiente acción, con balón para el Barcelona, Satoransky le puso el cierre al partido a falta de 33 segundos, porque en la posterior y precipitada acción del Tenerife, Abromaitis falló el triple. A pesar de dominar en el rebote (31/25) y en los triples, el Tenerife acabó sucumbiendo ante la maquinaria barcelonesa.
El Barcelona avanza a la semifinal en la que se medirá al Real Madrid. A los tinerfeños les queda el triste consuelo de haber plantado cara a los azulgranas casi hasta los últimos segundos del partido.
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