Aston Martin presenta el nuevo bólido de Fernando Alonso: “Este coche tiene que ser el primer paso para ganar”

La escudería británica promete un cambio con el que aspira a dejar atrás los problemas de 2022

El nuevo monoplaza de Aston Martin para la temporada 2023.

Aston Martin ha presentado este lunes el monoplaza en el que se sentarán Fernando Alonso y Lance Stroll durante la temporada 2023 de Fórmula 1. Los dos pilotos de la escudería han contemplado como se levantaba la bandera británica que tapaba el coche con el que aspiran a dejar atrás los problemas de 2022. El equipo se estancó en la séptima plaza de la tabla de constructores la pasada temporada, pero con 22 puntos menos de los que había acumulado en 2021. Dan Fallows, director técnico, ha afirmado que han cam...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Aston Martin ha presentado este lunes el monoplaza en el que se sentarán Fernando Alonso y Lance Stroll durante la temporada 2023 de Fórmula 1. Los dos pilotos de la escudería han contemplado como se levantaba la bandera británica que tapaba el coche con el que aspiran a dejar atrás los problemas de 2022. El equipo se estancó en la séptima plaza de la tabla de constructores la pasada temporada, pero con 22 puntos menos de los que había acumulado en 2021. Dan Fallows, director técnico, ha afirmado que han cambiado hasta un 90% del coche en busca de una mayor competitividad.

La nueva fábrica del equipo en Silverstone ha sido el escenario de la presentación. El monoplaza mantiene el verde oscuro de la pasada temporada, con algunos toques en verde lima y el morro como el elemento más llamativo. Desde la escudería dicen haber encontrado una laguna en la normativa, que les permitiría mejorar más de lo normal respecto al año anterior.

Fernando Alonso se ha mostrado ansioso por comenzar la temporada y ha señalado que su apuesta por Aston Martin viene por la presencia de nuevo talento en la fábrica y por un proyecto muy ambicioso. “Vamos con los pies en el suelo, pero este coche tiene que ser el primer paso para asegurarse ganar en el futuro”, ha apuntado el bicampeón.

Lawrence Stroll, propietario de la escudería, se ha mostrado muy motivado durante la presentación: “El coche presenta un cambio drástico. Hemos doblado el número de personal en el equipo y estoy apasionado. Y cuando me apasiono, gano”. El magnate canadiense ha recalcado varias veces que el objetivo de Aston Martin es ganar mundiales en el futuro.

El zarandeo general que supuso la entrada en escena de la nueva aerodinámica hace un año obligó a los distintos departamentos técnicos a jugársela con sus diseños, y el de Aston Martin la lio al malinterpretar la reintroducción del efecto suelo. Hubo que esperar hasta finales de mayo, cuando el Mundial pisó Europa (Montmeló), para que las actualizaciones que comenzaron a introducirse en el AMR22 revitalizaran un coche que rindió por debajo de las expectativas.

Los 18 puntos acumulados entre Sebastian Vettel y Lance Stroll en la primera mitad del curso significaron menos de la mitad de los 37 que la pareja fue capaz de sumar en el segundo tramo del calendario, una proporción que habla por sí misma.

La llegada en abril de Dan Fallows como director técnico, tras su extensa experiencia en el departamento de aerodinámica de Red Bull, debería darle más pegada al AMR23, el primer bólido de la escudería de Silverstone que conducirá Fernando Alonso. Por más bombo que se le haya dado al fichaje del asturiano, no parece sencillo imaginarse a su coche asomando el morro por la zona media alta del pelotón, esa en la que deberían verse McLaren y Alpine, si damos por sentado que los tres grandes (Red Bull, Mercedes y Ferrari) seguirán compitiendo en otra liga.

Las recientes declaraciones de Alonso en una entrevista concedida a la propia estructura de Silverstone (Gran Bretaña), en las que señalaba a Lance Stroll, su compañero y, además, hijo del propietario, como futurible campeón del mundo no solo no ayudan a creer en la remontada, sino que más bien la hacen más difícil de imaginar. Sobre todo, si tenemos en cuenta los números del canadiense, que debutó en 2017 (Williams) y que, desde entonces, solo una vez (2018) cerró el campeonato por delante de su vecino de taller (Sergey Sirotkin).

A pesar de que el equipo tiene previsto mudarse a las nuevas instalaciones –al lado de las actuales– durante la segunda mitad del año, el túnel de viento no estará operativo hasta 2025, para trabajar en el prototipo de 2026. Para entonces, Alonso ya tendrá 44 años y se hace complicado imaginárselo en la parrilla.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Más información

Archivado En