A España se le encoge el brazo

Las chicas de Jorge Dueñas, muy imprecisas en ataque, caen (26-27) ante Montenegro y pelearán el bronce a Corea del Sur

Londres -
Marta Mangué trata de consolar a Silvia Navarro.FELIPE TRUEBA (EFE)

Acostumbrada a la Caja de Cobre, España perdió la identidad en el Basketball Arena y ahora no le queda más remedio que disputar el bronce contra Corea, la misma selección con la que debutó, entonces con derrota. Jugó muy agarrotado el equipo de Jorge Dueñas contra Montenegro (26-27): perdió hasta 20 balones, remató tres veces a la madera, falló dos penaltis y no encontró la manera de defender a la pareja de lanzadoras de Montenegro: Bojana Popovic (6 goles de 9) y Katarina Bulatovic (9 de 13). No alcanzó ni siquiera la efectividad de Silvia Navarro (37%)

La portera española acabó tendid...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Acostumbrada a la Caja de Cobre, España perdió la identidad en el Basketball Arena y ahora no le queda más remedio que disputar el bronce contra Corea, la misma selección con la que debutó, entonces con derrota. Jugó muy agarrotado el equipo de Jorge Dueñas contra Montenegro (26-27): perdió hasta 20 balones, remató tres veces a la madera, falló dos penaltis y no encontró la manera de defender a la pareja de lanzadoras de Montenegro: Bojana Popovic (6 goles de 9) y Katarina Bulatovic (9 de 13). No alcanzó ni siquiera la efectividad de Silvia Navarro (37%)

La portera española acabó tendida en el suelo, llorando de forma desconsolada, difícil articular una palabra: “No hemos estado finas. Nos hemos atascado. No nos salieron las cosas”. Y, acto seguido, en un intento de reamarse, añadió: “Hay que seguir, nos queda un partido, la revancha contra Corea y no es un encuentro cualquiera sino que en juego está el bronce”. Marta Mangué, que ayer no fue la jugadora decisiva del equipo, concluyó: “Ha ganado el equipo que menos ha fallado. Puede que nos haya podido el cansancio, no se si físico o psíquico”.

“No estuvimos acertados y tampoco supimos superar un momento crítico”, argumentó el seleccionador, Jorge Dueñas, que probó todo tipo de defensas (5-1, 6-0, 4-2, presión) y no encontró remedio para detener el lanzamiento exterior de las jugadoras de Montenegro, mucho más altas, el brazo más suelto, más decididas. “Nos ha faltado tino también en ataque y nuestros errores en la finalización propiciaron contraataques suyos que acabaron por romper el encuentro”, insistió, “No le encontramos el punto al partido”.

ESPAÑA, 26; MONTENEGRO, 27

España: Navarro; Alonso (-), Barnó (-), Begoña Fernández (2), Eli Pinedo (5), Mangué (3) y Aguilar (4) -equipo inicial- Ciobanu (ps), Marta López (-), Nely Carla Alberto (6, 2p), Beatriz Fernández (5, 2p), Cuadrado (1), Amorós (-) y Elorza (-)

Montenegro: Bajaktarovic; Miljanic (2), Katarina Bulatovic (9, 4p), Knezevic (1), Popovic (6, 1p), Savic () y Lazovic (2) -equipo inicial- Vukcevic (ps), Radicevic (2), Dokic (), Jovanovic (1), Radovic (), Andela Bulatovic (1) y Mehmedovic (1)

Marcador cada cinco minutos: 2-3, 4-5, 7-7, 9-9, 12-10 y 13-13 (Descanso) 14-14, 15-16, 19-19, 19-22, 22-25 y 26-27 (Final)

Árbitros: Krstic y Ljubic (SLO). Excluyeron por dos minutos a Nely, Carla Y Alberto por España; y a Dokic, Lazovic, Andela, Bulatovic y Popovic por Montenegro.

“Para ganar necesitamos ser nosotras, y en la semifinal no lo hemos sido”, coincidieron varias internacionales, conscientes de la permeabilidad de su defensa, su mejor seña de identidad. “No merecimos ganar”, reiteró el técnico vasco. “La defensa no ha estado al 100%, como acostumbraba en los últimos partidos, no tan intensa ni agresiva, puede que por la fatiga”, precisó Macarena Aguilar. “No le encontramos el hilo del partido Nos habían estudiado bien. Ahora hay que darlo todo por el bronce”.

“El bronce lo gana normalmente el equipo más fuerte psicológicamente”, concluyó el seleccionador. “Podemos hacerlo como ya demostramos en el Mundial de Brasil, cuando quedamos terceros, aunque ahora no hemos podido repetir la victoria de entonces en cuartos de final contra Montenegro. “No hay que lamentarse sino levantarse. Recuperar y preparar bien el encuentro. Va a ser complicado. Nos conocemos bien y cada vez hay más cansancio”.

Muy imprecisas, las españolas no supieron romper la semifinal con el marcador de cara (12-10 y 13-13 al descanso), cuando Nely Carla estaba muy acertada (marcó 5 de sus 6 goles en el primer tiempo) y en la segunda parte no tuvieron poder de reacción para frenar la escapada de Montenegro (19-24), representada por el martillo de sus lanzadoras, Popovic y Bulatovic (15 goles en total). Aunque el empuje de Macarena Aguilar permitió arreglar el marcador, la semifinal ya estaba perdida y España acabará como empezó los Juegos: jugando contra Corea. Entonces derrotada, ahora aspira a tomarse la revancha.

El bronce sería la mejor manera de animar a Silvia Navarro, la portero que le paró 43 tiros a las cañoneras de Montenegro en el Mundial de Brasil y que ayer se quedó en 15 (37%), una buena cifra, insuficiente, sin embargo, para ganar a Montenegro en los Juegos.

Sobre la firma

Archivado En