Cristóbal Rovira: “Todo indica que se vendrá una disputa entre ambas derechas”

El profesor de ciencia política de la Universidad Católica analiza el triunfo del ‘en contra’. Dice que el texto “estaba más a la derecha de la posición del votante medio” y plantea que a Kast “le costará mostrarse como una figura capaz de construir acuerdos”

Cristóbal Rovira en su casa en Santiago, el pasado agosto.SOFIA YANJARI

Cristóbal Rovira, profesor del Instituto de Ciencia Política de la Universidad Católica, es uno de los investigadores chilenos que más ha estudiado el fenómeno de la ultraderecha en el mundo. Por lo mismo, observa de cerca al Partido Republicano, liderado por José Antonio Kast, y ahora a la nueva apuesta de la derecha más extrema que emergió en las últimas semanas, liderada por el senador Rojo Edwards.

El académico plantea que será interesante mirar cómo estas nuevas derechas ultras maneja...

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Cristóbal Rovira, profesor del Instituto de Ciencia Política de la Universidad Católica, es uno de los investigadores chilenos que más ha estudiado el fenómeno de la ultraderecha en el mundo. Por lo mismo, observa de cerca al Partido Republicano, liderado por José Antonio Kast, y ahora a la nueva apuesta de la derecha más extrema que emergió en las últimas semanas, liderada por el senador Rojo Edwards.

El académico plantea que será interesante mirar cómo estas nuevas derechas ultras manejarán sus diferencias tras la derrota este domingo del a favor a la nueva Constitución, redactada por un Consejo Constitucional con mayoría de republicanos, y si lograrán mantener la hegemonía frente a los sectores más tradicionales.

Pregunta. ¿Cómo analiza el resultado de esta elección?

Respuesta. No es una sorpresa. Todas las encuestas estaban mostrando una tendencia a favor de la opción en contra, pero no teníamos certeza de la diferencia. Diez puntos reflejan que el triunfo es bastante contundente, sobre todo porque hubo una alta participación electoral. Aun cuando no tenemos datos claros aun, todo indica que la Constitución propuesta estaba más a la derecha de la posición del votante medio.

P. ¿Cómo queda la derecha dura de José Antonio Kast con este resultado?

R. No es un buen resultado, ya que Kast y el Partido Republicano no solo hicieron campaña a favor de la nueva Constitución, sino que ellos fueron quienes tuvieron mayor influencia en su escritura. A su vez, ahora apareció una derecha que está más a la derecha de la ultraderecha (Rojo Edwards, Johannes Kaiser, etc.). Está por verse cómo la ultraderecha podrá manejar sus diferencias internas.

P. ¿Cuánto empaña este resultado la opción presidencial de Kast?

R. Es difícil hacer pronósticos, porque faltan dos años para la elección presidencial, pero claramente Kast no sale fortalecido con este resultado. Ahora le costará mostrarse como una figura capaz de construir acuerdos y de acercarse hacia la mayoría de la sociedad. En consecuencia, los niveles de rechazo hacia su persona seguirán siendo elevados, lo cual es una gran dificultad sobre todo en su potencial participación en una segunda vuelta electoral donde gran parte de las personas vota por el mal menor.

P. ¿Cómo queda la derecha tradicional?

R. Si bien es cierto que tampoco es un buen resultado para la derecha tradicional, sale menos golpeada que la ultraderecha. Todo indica que se vendrá una disputa entre ambas derechas y por ahora la derecha tradicional está mejor posicionada, porque tiene la posibilidad de mostrarse como más dialogante. Sin embargo, está por verse si utilizará esta oportunidad para buscar tender puentes con el mundo del centro y la izquierda moderada. La derecha convencional necesita levantar una voz propia y solo así podrá dejar de ser el hermano menor dentro del mundo de las derechas.

P. ¿Puede esa derecha histórica recuperar la hegemonía de su sector?

R. Esto va a depender sobre todo de cuán dispuesta está la derecha convencional (UDI, RN y Evópoli) en diferenciarse y distanciarse de la ultraderecha. Si lleva a cabo esta estrategia, podrá mostrar que tiene un proyecto político propio, el cual se distingue de la ultraderecha. Pero si continúa coqueteando con la ultraderecha y estableciendo una alianza con ella, como se vio en el proceso constitucional, va a seguir desdibujándose y la hegemonía la tendrá la ultraderecha.

P. ¿Ayuda en algo al Gobierno este triunfo del a favor?

R. Por cierto que este resultado le da un respiro, pero sería un exceso decir que es un triunfo. Para el Gobierno hay al menos dos buenas noticias. En primer lugar, este voto demuestra que la introducción del voto obligatorio no siempre ni necesariamente favorece a la derecha. En segundo lugar, con esto se cierra el tema constitucional y el Gobierno tiene la oportunidad de tratar de avanzar en ciertas reformas. Para ello tiene que unir a todos sus actores y, simultáneamente, intentar tender puentes con aquellos sectores de la derecha convencional que están interesados en establecer acuerdos, para así diferenciarse de la ultraderecha.

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