Púlpito en campaña: un sacerdote usa su misa para pedir el voto
El padre Javier Prada, de la Iglesia Episcopal de Colombia, aprovechó una eucaristía para impulsar su aspiración y la de dos copartidarios suyos del Centro Democrático
El padre Javier Prada ofició la eucaristía el pasado 6 de agosto en Neomundo, un centro de convenciones en Bucaramanga, Santander. “Declaramos cielos abiertos de bendición para su campaña y la victoria en nombre de Jesús de Nazaret. Amén”, afirmó Prada, dirigiéndose a un hombre que lo acompañaba en el altar. Se trataba de Milton Villamizar, candidato del uribista Centro Democrático a la Alcaldía de Floridablanca, la segunda ciudad más importante del departamento. El luga...
El padre Javier Prada ofició la eucaristía el pasado 6 de agosto en Neomundo, un centro de convenciones en Bucaramanga, Santander. “Declaramos cielos abiertos de bendición para su campaña y la victoria en nombre de Jesús de Nazaret. Amén”, afirmó Prada, dirigiéndose a un hombre que lo acompañaba en el altar. Se trataba de Milton Villamizar, candidato del uribista Centro Democrático a la Alcaldía de Floridablanca, la segunda ciudad más importante del departamento. El lugar, atiborrado de fieles, se llenó de aplausos. La misa pronto tomó tintes de un acto de proselitismo político.
El padre continuó y bendijo otra aspiración electoral. Los asistentes repetían al unísono cada una de sus palabras. “Amado Jesús, te pedimos en esta tarde que derrames sobre él, su vida, su familia y la presencia del Altísimo para que le concedas tu victoria”, dijo refiriéndose a Hugo Rodríguez, quien también recibió el aval del Centro Democrático y busca ser concejal de Bucaramanga. El episodio fue grabado por cámaras de celular y difundido por Vanguardia, el principal periódico de la región.
El sacerdote aprovechó la ocasión, sobre todo, para impulsar su propia candidatura, porque quiere llegar a la Asamblea de Santander por el mismo partido de derecha. “El Señor, durante algunos meses, me ha llamado a servirle de una forma más fuerte para cambiar esto, cada día hay más pobreza, cada día hay más dificultades y quiero que me acompañen, que no me vayan a dejar solo”, aseveró, según Vanguardia.
En diálogo con EL PAÍS, Prada indicó que su proceder no supuso ningún abuso de sus potestades como religioso y que, por el contrario, hizo valer sus derechos como ciudadano. ”Antes que todo somos hijos de Dios. Y los candidatos de Dios, que quieren gobernar al pueblo de Dios, siempre buscan la bendición de Dios. La libertad de cultos es respetable sin importar la persona. Lo que hicimos fue una consagración de las candidaturas”, aseguró.
Prada recalcó que no pertenece a la Iglesia Católica sino a la Iglesia Episcopal de Colombia, una comunión que se desprende de la Iglesia Anglicana. También señaló que sus superiores lo autorizaron para ser candidato. “El obispo Patricio Viveros me dio una licencia para hacer la campaña y celebrar eucaristía. Sé que quedaré como uno de los más votados y podré seguir ofreciendo un servicio ministerial, pero también con proyectos de alto impacto”, afirmó.
Al ser interrogado sobre apoyos en el pasado a otros políticos, el religioso fue enfático en que esta será su primera vez como participante activo de una campaña. Sobre su visión política, su cuenta de Twitter —o X— es reveladora. Allí se encuentran publicaciones desde hace diez años en las que el sacerdote es crítico del proceso de paz que se adelantó entre el Gobierno y las FARC, así como del entonces presidente Juan Manuel Santos.
La separación entre Iglesia y Estado fue uno de los principios que trajo consigo la Ilustración. Es una regla constantemente desconocida y que suele traer importantes réditos políticos. En las elecciones regionales que se llevarán a cabo el próximo 29 de octubre, Villamizar, Rodríguez, y el padre Prada, pueden ser la prueba viva de ello y del poder de una unción.
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