Petro revive a Uribe como líder de la oposición
El uribismo, representado en el Centro Democrático, se reacomoda en el nuevo panorama político y recupera relevancia
Álvaro Uribe reaparece. Tras una campaña presidencial en la que por primera vez en 20 años no fue protagonista y el Centro Democrático, su partido, no tuvo candidato, el expresidente ha vuelto para hacer oposición. Una “oposición razonable”, dijo tras el encuentro con Gustavo Petro este miércoles, a invitación del líder de la izquierda. La foto de la reunión, ambos sentados en la misma mesa, marca el inicio de un nuevo momento político, que vuelve relevante al uribismo fre...
Álvaro Uribe reaparece. Tras una campaña presidencial en la que por primera vez en 20 años no fue protagonista y el Centro Democrático, su partido, no tuvo candidato, el expresidente ha vuelto para hacer oposición. Una “oposición razonable”, dijo tras el encuentro con Gustavo Petro este miércoles, a invitación del líder de la izquierda. La foto de la reunión, ambos sentados en la misma mesa, marca el inicio de un nuevo momento político, que vuelve relevante al uribismo frente a la aplanadora legislativa con la que cuenta Petro.
Mónica Pachón, doctora en Ciencia Política y profesora asociada de la Universidad de los Andes, dice que no será una oposición parecida a la que el Centro Democrático le hizo a Juan Manuel Santos. “Nos acostumbramos a ver a un Álvaro Uribe muy intransigente con un Gobierno que de alguna forma lo había traicionado. Uribe estuvo poco más de seis años en pie de lucha porque para él había una defensa necesaria de una oposición política a Santos. No es gratuito que se haya metido en el Congreso”. Uribe fue el principal opositor de Santos tras una ruptura marcada principalmente por el proceso de paz con las FARC.
“Álvaro Uribe entiende la importancia de hacer oposición. Y la va a hacer como lo dijo porque no tiene sentido hacerlo de otra forma. Los números no les dan para no ser una oposición razonable. Petro tiene una mayoría holgada en el Congreso, pero no hay un partido ideológico más fuerte que el Centro Democrático, que vive de un legado”, opina Pachón. Para la profesora, el uribismo se vuelve relevante en la discusión y Uribe “recobra la sensatez que no pudo tener con Juan Manuel Santos”.
A Petro le viene muy bien un diálogo con Uribe porque le da legitimidad a su Gobierno y envía un mensaje de tranquilidad. “El mensaje de ‘con todos estoy dispuesto a hablar’. Y para esto, el Centro Democrático cumple una función fundamental”, dice la profesora. En una entrevista con este diario, el propio líder de la izquierda reconocía que hay una derecha más allá del propio Uribe “organizándose alrededor del fascismo” y preparada para reaccionar en caso de un fracaso de su Gobierno. Su llamada a tender puentes con el expresidente busca también alejar esas corrientes.
Para el analista político, Pedro Viveros, la foto de Uribe y Petro sentados en la misma mesa muestra una nueva era en Colombia, donde la oposición va a hablar con el Gobierno y no será solo sobre las FARC. “La bruma de la guerra no nos dejaba ver los verdaderos problemas del país, ahora estamos viéndolos, no son nuevos, pero es la primera vez que hacen parte de la conversación”, dice.
El Centro Democrático está prácticamente solo en la oposición, pero tiene a las figuras más relevantes de la derecha colombiana. Paloma Valencia, María Fernanda Cabal y Miguel Uribe se manifestaron en oposición desde el mismo día que aceptaron el triunfo de Petro. “Seremos la minoría en el Congreso, pero representaremos al 50% del país. Quienes no votaron por Petro, quienes sienten angustia ante la incertidumbre y quienes tienen miedo de perderlo todo, pueden contar conmigo”, ha dicho el senador Miguel Uribe.
“Petro no solo está logrando gobernabilidad a través de las mayorías en el Congreso, también ha tendido puentes con sectores que eventualmente podrían ser de oposición, demostrando que con todos se puede hablar. Ese es un mensaje poderoso y necesario para el país”, señala el analista Viveros.
Gustavo Petro ha logrado en apenas 10 días hablar con prácticamente todos los sectores políticos en su búsqueda de lo que ha llamado el “gran acuerdo nacional” y ha garantizado gobernabilidad en el que será el inicio de su mandato. “Ojalá el país pueda ver el escenario del diálogo de las diferencias. La conversación con el expresidente Uribe fue provechosa y respetuosa. Encontramos las diferencias y los puntos comunes. Siempre habrá un diálogo gobierno/ oposición”, dijo tras su encuentro con Uribe. El 7 de agosto, el líder de izquierdas asumirá el poder con el respaldo de distintos partidos y un mensaje de unidad.
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