Carlsen pierde la primera partida del torneo donde debe afianzarse como ‘número uno’
Caruana derrota al noruego con claridad mientras Gukesh, de 16 años, tumba a Firouzja en un tremendo combate
Los dos primeros de la lista mundial han caído en la jornada inaugural del Norway Chess, probablemente el torneo privado más duro de 2023. El noruego Magnus Carlsen, ante Fabiano Caruana, un día después de fracasar en el estadounidense torneo relámpago que tradicionalmente antecede al clásico en Stavanger (Noruega). Y Alireza Firouzja, aún 2º del mundo a punto de cumplir 20 años, frente al indio Dommaraju Gukesh, quien cumplió 17 este lunes y salta al 15º. Las otras tres partidas (So-Nakamura, Mamediárov-Tari y Abdusattórov-Giri) termina...
Los dos primeros de la lista mundial han caído en la jornada inaugural del Norway Chess, probablemente el torneo privado más duro de 2023. El noruego Magnus Carlsen, ante Fabiano Caruana, un día después de fracasar en el estadounidense torneo relámpago que tradicionalmente antecede al clásico en Stavanger (Noruega). Y Alireza Firouzja, aún 2º del mundo a punto de cumplir 20 años, frente al indio Dommaraju Gukesh, quien cumplió 17 este lunes y salta al 15º. Las otras tres partidas (So-Nakamura, Mamediárov-Tari y Abdusattórov-Giri) terminaron en tablas y -de acuerdo con la norma que distingue a esta competición-fueron seguidas de muerte súbita, con victorias de So, Giri y Mamediárov.
“Lo que me sorprende no es solo que Magnus pierda, sino cómo ha perdido”, ha señalado la húngara Judit Polgar, única mujer de la historia que ha estado entre los diez mejores del mundo, al despedirse del público tras más de cuatro horas de comentarios en directo. Ciertamente, el excampeón del mundo ha rendido por debajo de su nivel: no es extraordinario que Caruana, con blancas, salga de la apertura con clara ventaja; pero sí lo es que, sometido a presión, Carlsen no encuentre las mejores defensas y se rinda en el lance 37. Más aún si ello ocurre un día después de su 7º puesto en el torneo relámpago, que ganó el uzbeko Nodirbek Abdusattórov. Carlsen es ahora el 3º del mundo en esa modalidad, tras Firouzja y Nakamura. Y el 2º en rápidas, superado por el chino Liren Ding, nuevo campeón del mundo desde el 1 de mayo.
Precisamente la renuncia al título mundial, porque no soportaba la perspectiva de perder frente a adversarios que él considera claramente inferiores, sitúa a Carlsen ante la obligación psicológica de lograr un gran triunfo en Stavanger. La presencia de Firouzja, Gukesh y Abdusattórov, 20º del mundo a los 18 años, así como la de Caruana (4º del mundo tras su triunfo de hoy), Nakamura (6º), Giri (7º) y So (8º), es una prueba de fuego para el escandinavo, más necesitado que nunca de demostrar que es el mejor, aunque no sea el campeón. Si Firouzja y Gukesh disputan todas sus partidas a degüello, como han peleado hoy entre ellos, el nivel de exigencia para Carlsen será altísimo.
El peculiar formato de Stavanger otorga tres puntos al ganador de una partida lenta, uno y medio al de una ‘muerte súbita’ (diez minutos para las blancas, obligadas a ganar, y siete para las negras) y uno al derrotado en el desempate. También es raro el ritmo de juego: dos horas para los primeros 40 movimientos, sin incremento, y diez minutos más para el resto de la partida. “En este torneo va a haber unos apuros de tiempo tremendos. El reloj será un elemento decisivo”, asegura el triunfante Caruana.
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