El gobernador de Tabasco acusa al senador Adán Augusto López de encubrir a un líder criminal
Javier May señala al exsecretario de Seguridad del Estado y antiguo miembro del gabinete de López de formar parte de la escalada de violencia en la región
El desbordamiento de la violencia en Tabasco, Estado al sur de México, ha sacudido finalmente a la política local y anuncia una ruptura en Morena, el partido gobernante. El mandatario, Javier May, que tomó las riendas del Estado hace poco más de tres meses, ha responsabilizado a la Administración anterior de encumbrar a un líder criminal. Se trata de Hernán Bermúdez Requena, alias Comandante H, extitular de la Secretaría de Seguridad tabasqueña. Los señalamientos de May recaen en Adán Augusto López, que asumió la gubernatura en 2018 y la dejó tres años después para convertirse en el Secretario de Gobernación de Andrés Manuel López Obrador. En su lugar, como mandatario interino, quedó Carlos Merino, quien mantuvo la estructura de Gobierno heredada por López. Este último es actualmente coordinador de Morena en el Senado y uno de los principales operadores políticos de la presidenta, Claudia Sheinbaum.
Las noticias de la narcoviolencia en Tabasco, el Estado natal de López Obrador, comenzaron a ocupar los titulares de los diarios en los últimos meses. En el centro de la pugna criminal por el lucrativo negocio del tráfico de migrantes y el huachicol —combustible robado a Pemex— están el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y un grupo local llamado La Barredora, encabezado, presuntamente, por Bermúdez Requena. Un informe de la Secretaría de la Defensa filtrado por los hackers de Guacamaya en 2022 indicaba que La Barredora era una célula criminal al servicio del CJNG. La escalada de la violencia sugiere una ruptura entre ambas organizaciones, un escenario que refuerzan informes recientes de la Fiscalía estatal.
Este miércoles, la presidenta Sheinbaum anunció el envío de 180 elementos del Ejército y la Guardia Nacional a Tabasco en un esfuerzo por pacificar el Estado. La medida vino tras el hallazgo de 10 cuerpos desmembrados y el asesinato de un exdirector de la Agencia Estatal de Investigación. La primera semana de enero, un ataque armado a un bar de Villahermosa, la capital del Estado, dejó al menos cinco muertos y siete heridos. Días después, en una de esas postales que muestran la impunidad del crimen, miembros del CJNG regalaron roscas de Reyes a la población en varias comunidades tabasqueñas. “Lo que queremos es ayudarlos, queremos apoyarlos y estamos para cuidarlos, no para joderlos”, decían los sicarios.
El diario Reforma ilustra este jueves el saldo de la escalada de la violencia en Tabasco en el último año. Según el periódico, en 2023 hubo 253 homicidios en el Estado. En 2024, la cifra se disparó a 894. Bermúdez Requena dejó la titularidad de la Secretaría de Seguridad en enero de 2024. En su lugar, fue designado Héctor Francisco Morán González, un general del Ejército, siguiendo la tradición de los Estados que encomiendan la seguridad pública a militares, considerados incorruptibles.
En noviembre pasado, a las pocas semanas de tomar las riendas de un Estado en llamas, May hizo las polémicas declaraciones que ponían el foco en la Administración anterior, encabezada también por morenistas. “Nosotros nunca vamos a pactar con la delincuencia organizada. Va a haber cero impunidad [...]. Entonces, creo que quienes estuvieron antes que nosotros tendrán que explicar todo esto”, dijo el mandatario en una rueda de prensa. “Es grave el daño que le hicieron a Tabasco. Todos saben, aquí era vox populi, quién comandaba La Barredora. ¿O no sabemos?”. La prensa local leyó entre líneas el nombre de Bermúdez Requena, quien estuvo al frente de la Secretaría de Seguridad por cinco años.
Algunos de los miles de documentos de inteligencia del Ejército filtrados por Guacamaya en 2022 daban cuenta de los presuntos nexos de Bermúdez Requena con el crimen organizado. Los informes, citados por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, señalaban que Comandante H había facilitado que La Barredora tomara el control de cuatro municipios tabasqueños, incluido Macuspana, donde nació López Obrador. Los documentos, elaborados por militares entre 2019 y 2022, mencionaban que “el gobernador” era aliado del grupo delictivo, en alusión, al parecer, al hoy senador López.