Por la paz y contra el autoritarismo: diputados progresistas de toda América se reúnen en Bogotá en su primer Congreso Panamericano

Diputados de al menos 20 partidos políticos progresistas de América del Norte, Central y del Sur se reúnen este viernes en la inauguración de su primer Congreso Panamericano. En el encuentro participarán senadores y representantes del Nuevo Partido Democrático de Canadá, el Partido Demócrata de Estados Unidos, Morena de México, el Movimiento Semilla de Guatemala, el Pacto Histórico de Colombia, el Partido de los Trabajadores de Brasil y el Frente Amplio de Chile, entre otros. El objetivo de la reunión, que será en Bogotá y contará con la presencia del presidente de Colombia, Gustavo Petro, y de su canciller, Luis Gilberto Murillo, es construir una agenda política común en tres grandes áreas de cooperación: democracia, cambio climático y paz. La primera edición de este congreso también ha sido pensada como un espacio para que líderes regionales del centro y la izquierda planteen alternativas que ayuden a resolver la crisis en Venezuela y expongan sus ideas para combatir el autoritarismo.

La senadora colombiana María José Pizarro, del Pacto Histórico, explica la importancia del congreso para la unidad del movimiento progresista en la región. “Colombia se ha propuesto ser una potencia de vida y para ello es crucial discutir y establecer horizontes comunes como sociedades y como fuerzas políticas diversas que, teniendo en cuenta las particularidades de cada país, puedan ayudar a resolver los problemas que se comparten”, dice.

Este Congreso Panamericano tiene su origen en una visita que, en agosto de 2023, realizó un grupo de congresistas estadounidenses a distintos países de América Latina. La delegación norteamericana, liderada por la representante Alexandria Ocasio-Cortez, buscaba dar los primeros pasos para revertir la desconexión histórica entre los políticos de EE UU y sus pares en el resto de la región. “El Congreso Panamericano busca institucionalizar ese diálogo, con tres propósitos principales: construir una comunidad, forjando relaciones entre líderes regionales que nunca antes se habían reunido; construir una agenda, identificando áreas de cooperación hemisférica para corregir desigualdades, injusticias y urgencias regionales; y construir una estrategia, compartiendo mejores prácticas y herramientas políticas exitosas para llevar a sus respectivas legislaturas”, se lee en el comunicado del encuentro.

Alex Main, director de política internacional del Centro de Investigación Económica y Política con sede en Washington, explica que el encuentro es una oportunidad para buscar nuevas soluciones a los retos comunes del continente, que incluyen las amenazas a la democracia, la crisis climática, las olas migratorias sin precedentes y la desigualdad. “Estos problemas requieren la cooperación hemisférica, pero actualmente no existe un foro establecido para la comunicación, el intercambio de experiencias y el desarrollo de iniciativas comunes entre los líderes del Congreso en todas las Américas”, dice Main. Y añade: “Es alentador ver a los legisladores estadounidenses, que históricamente han estado en gran medida ausentes de los esfuerzos de diálogo regional, participando en amplios debates con sus pares regionales en un espíritu de respeto mutuo e igualdad”.

Greg Casar, congresista del Partido Demócrata de EE UU, coincide con Main: “Hace un año, me uní a una histórica delegación progresista en un viaje a América Latina para empezar a construir una nueva relación con nuestros homólogos, basada en el respeto mutuo. Ahora, continuamos construyendo esa relación con el Congreso Panamericano porque entendemos la necesidad de cooperación y diálogo para superar los desafíos de nuestro hemisferio”. Casar afirma que el encuentro será determinante para que los partidos progresistas de la región se comprometan a trabajar juntos para “sobrevivir a la crisis climática, mejorar la situación de los trabajadores, proteger la democracia, derrotar al extremismo y apoyar la paz”.

El diputado mexicano Alfonso Ramírez Cuéllar, de Morena, y Ericka Ñanco, miembro de la Cámara de Diputados de Chile por el Frente Amplio, creen que el evento será un espacio crucial para fortalecer “la cooperación hemisférica” en los tres temas urgentes transversales: el clima, la paz y la democracia. “Como diputada mapuche, valoro profundamente esta oportunidad de unir nuestras voces para abordar desafíos comunes, desde la protección de los territorios ancestrales hasta la renovación de las instituciones democráticas. Este congreso no sólo refleja nuestro compromiso con la justicia social y medioambiental, sino que también establece una plataforma en la que deben apoyarse las fuerzas progresistas de todo el continente, para coordinar acciones conjuntas en pro de la liberación de los pueblos”, dice Ñanco. Y concluye: “La única forma de avanzar en la conquista de los derechos sociales es la unidad de las fuerzas de cambio que representan los intereses de los pueblos, desde Araucanía hasta Alaska”.

Pedro Uzcai, del Partido de los Trabajadores de Brasil, cree que el encuentro es la oportunidad para reafirmar la democracia como tema universal de la sociedad contemporánea. “Contrarrestaremos estos movimientos autoritarios que han ganado protagonismo en la escena política en los últimos años. Luis Redondo, presidente del Congreso Nacional de Honduras, plantea que el diálogo de tres días de Congreso debe materializarse en propuestas concretas que reflejen principios compartidos y promuevan una agenda progresista en la región. “Debemos avanzar hacia soluciones sostenibles y equitativas que beneficien a todas nuestras naciones. Confío plenamente en que cada uno de nosotros aportará su experiencia y visión únicas para enriquecer este debate y lograr resultados significativos. Juntos, podemos construir un futuro más próspero y seguro para las generaciones venideras en todo el continente”.

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