La Empresa Metro de Bogotá impone una multa de 812 millones de pesos al consorcio chino a cargo de la primera línea

El concesionario no ha cumplido con los plazos para entregar la totalidad de los estudios y diseños preliminares

Claudia López en la presentación de los nuevos vagones del metro de Bogotá, en noviembre de 2022.Chepa Beltran (Long Visual Press)

La Empresa Metro de Bogotá (EMB) ha sancionado este jueves con una multa de 812 millones de pesos (unos 196.000 dólares) al consorcio Metro Línea 1, de accionistas chinos y encargado de la construcción de la primera línea del nuevo sistema de transporte masivo. El motivo es el retraso en completar los estudios y diseños preliminares, que tendrían que haberse entregado en diciembre de 2022 a la Interventoría. La sanción no es...

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La Empresa Metro de Bogotá (EMB) ha sancionado este jueves con una multa de 812 millones de pesos (unos 196.000 dólares) al consorcio Metro Línea 1, de accionistas chinos y encargado de la construcción de la primera línea del nuevo sistema de transporte masivo. El motivo es el retraso en completar los estudios y diseños preliminares, que tendrían que haberse entregado en diciembre de 2022 a la Interventoría. La sanción no es estática: parte de un cálculo que cuantifica el monto desde el pasado 5 de mayo y que se actualizará a medida que pase más tiempo de incumplimiento.

El contrato para la construcción de la primera línea se firmó en noviembre de 2019, durante las administraciones del presidente Iván Duque y del alcalde Enrique Peñalosa, quien estaba a un mes de culminar su mandato. El consorcio chino APCA Transmimetro, ganador de la licitación, creó la sociedad concesionaria Metro Línea 1 y se comprometió a terminar la obra en 2028, para luego operar y mantener el sistema por 20 años. El acuerdo contempla un tramo de 23,6 kilómetros, a nivel desde el Portal de las Américas en el suroccidente hasta el centro de la ciudad, y luego elevado por el borde oriental hasta la calle 78, con una parte significativa por la Avenida Caracas.

El plazo para entregar y aprobar los estudios y diseños venció el 30 de marzo. Pero la Interventoría encontró que el consorcio no los entregó todos de forma cabal. Eso llevó a la Alcaldía a extender el plazo hasta el 5 de mayo y a la alcaldesa Claudia López a advertir de que no habría otra prorroga: “Acogemos la propuesta, pero si incumplen de nuevo iniciaremos el proceso de sanción y multa por incumplimiento. Cada día que se atrasen en entregar los estudios y diseños definitivos le acarreará al consorcio una multa de 50 salarios mínimos [unos 58 millones de pesos]”, escribió en Twitter. Aun así, el consorcio no logró que todos esos documentos tuvieran el aval, conocido como no objeción, el 5 de mayo.

López rechazó en marzo la explicación de que el retraso se debía a la pandemia. “En el 2023, no nos pueden venir a argumentar problemas con el covid, que se terminó en el 2021″, enfatizó.

Metro Línea 1 interpuso una tutela contra EMB en la que alegó que esta estableció la sanción sin respetarle el debido proceso. EMB, sin embargo, cita en un comunicado de este jueves un fallo a su favor de un juzgado civil de Bogotá: “Las actuaciones de trámite de la administración que se atacan, no son irrazonables, arbitrarias, ni desproporcionadas”.

Las obras tienen un avance del 20%, según explica EMB en su comunicado. Ya se han concretado acciones vinculadas a la compra de predios, la construcción del patio taller de la línea, la cimentación de un puente vehicular y la ejecución de las obras del intercambiador vial de la calle 72.

Los estudios y diseños necesarios se agrupan en cinco categorías: viaducto, estaciones de metro, estaciones de Transmilenio, edificios del patio taller y sistema metro ferroviario. EMB aclara que la Interventoría ya ha entregado un certificado de no objeción del 60% respecto a los estudios y diseños preliminares, que incluyen las obras con las que se ha avanzado.

Los retrasos en la documentación se suman a otros obstáculos que ha enfrentado el metro en los últimos meses. El presidente de la República, Gustavo Petro, insiste en modificar el contrato para que incluya un tramo subterráneo por la Avenida Caracas. La alcaldesa, sin embargo, prefiere continuar con el metro elevado para evitar demoras y garantizar que el metro entre en funcionamiento en 2028.

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