La sucesión de Zapatero
Ha sido una estrategia "muy meditada, muy interiorizada" y una parte fundamental de la misma se centra en "el momento" del anuncio. Este fue el comienzo de la explicación interna que el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ofreció a la Comisión Ejecutiva Federal de su partido.
El PSOE podría tener que celebrar su congreso a partir de este mes de julio cuando se cumplirán tres años desde el último. Sus estatutos fijan que esa asamblea puede tener lugar entre el tercer y el cuarto año desde el fin del último. Pero no parece que el aparato del PSOE tenga la menor intención de abrir también ese debate.
A Mariano Rajoy no le da miedo mojarse. Ni es su estilo ni es casual. Es una decisión firme y muy meditada: ha optado por no mojarse. Es el eje de su estrategia, y tiene un motivo claro: ganar votos. El líder del PP lo explicó clarísimo ayer en la cadena SER.
El polvorín del PSOE andaluz estalló ayer. El que fuera el número dos de los socialistas en Andalucía durante 14 años y actual consejero de Gobernación y Justicia de la Junta, Luis Pizarro, presentó su dimisión abriendo una crisis interna a menos de dos meses de las elecciones municipales.
Frente a la tesis del PP de rendición del Estado ante ETA en el proceso del final dialogado del terrorismo de 2006 y parte de 2007 entre el Gobierno y la banda terrorista, los testimonios, tanto de los negociadores en nombre del Ejecutivo ante el juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruz, como los de ETA recogidos en su asamblea de 2008, lo desmienten.
Más de seis meses después de abrir el procedimiento abreviado contra el juez Baltasar Garzón por las escuchas del caso Gürtel, el instructor del Tribunal Supremo Alberto Jorge Barreiro rechazó ayer el recurso de reforma que imputaba a Garzón supuestos delitos de prevaricación e intercepción de comunicaciones con violación de garantías.
Una vez más, y son ya incontables, el expolicía José Amedo volvió ayer por sus fueros. Se trataba, en esta ocasión, del juicio contra el que fuera jefe superior de Policía de Bilbao Miguel Planchuelo, acusado de haber financiado en 1986 los ametrallamientos de los bares Batxoki y La Consolation, en el sur de Francia.