Más de 100 años y un confuso saqueo en su fábrica: la empresa mexicana El Oso resiste los embates del tiempo
La empresa de productos para lustrar zapatos, con 107 años de historia, fue allanada en enero y un pequeño comunicado publicado en sus redes sociales dejó más dudas que respuestas
El oficio del bolero, o limpiabotas, aún está latente en las calles de Ciudad de México. Es fácil ubicarlos, cargan consigo una caja de madera de aproximadamente 30 centímetros de largo y 20 de alto, algunas tienen un asa en forma de planta de zapato. Otras ni asa tienen, los boleros las llevan bajo el brazo. Dentro se encuentran materiales para lustrar y sacar brillo a diferentes tipos de calzado. Su especialidad es el producto hecho de piel que engrasan con un betún enlatado. De la tapa resalta un nombre en letras rojas sobre un fondo blanco: El Oso. Una empresa que ha estado de acutualidad estos días por un confuso saqueo en una de sus fábricas.
La empresa mexicana El Oso fue fundada en 1922 por Prisciliano Pérez Buenrostro, un hombre originario de la Sierra Gorda de Querétaro que llegó a Ciudad de México durante el auge de la Revolución Mexicana. Pérez Buenrostro consiguió trabajo en un almacén y descubrió la grasa para pieles que llegaba de Estados Unidos, según contó su sobrino Mario Alberto Pérez Lozano, actual presidente de la compañía, luego de ser galardonados con la Charola de Plata 2022, un reconocimiento que otorga el Estado de Guanajuato y es considerado de gran importancia dentro del sector.
Luego de estar en contacto con este producto, Prisciliano Pérez Buenrostro decidió mejorar la fórmula. En 1918 fundó la fábrica y terminó por establecerse formalmente cuatro años después. El empresario acudía con frecuencia al recién inaugurado zoológico de Chapultepec los fines de semana. De acuerdo con su sobrino, el nombre del proyecto surge porque en esa época se juntaba mucha gente alrededor del sitio que resguardaba al primer oso polar en México y Pérez Buenrostro tuvo su epifanía para el nombre.
En 2025, la empresa cumple 107 años de existencia. Comparte la lista con nombres longevos como El Globo, la editorial Porrúa y Gayosso, por ejemplo. No es fácil mantenerse vigente en el mercado durante tanto tiempo. Oscar Ríos, coordinador de ventas de El Oso, adjudica una parte del éxito a los boleros, que consideran los publicistas más eficaces, dijo para el medio Expansión en enero de 2024.
El éxito de la marca es, sobre todo, silencioso. Han sido pocas las veces en que El Oso se menciona en medios de comunicación o redes sociales. Sin embargo, dos eventos recientes los han puesto en el mapa. En el mapa virtual, al menos, porque en las calles y en las casas de los mexicanos, de acuerdo con incontables usuarios en X, siempre han estado presentes.
El pasado viernes 17 de enero, el nombre de la fábrica volvió a coger bullo en redes tras el saqueo de su fábrica ubicada en la colonia Portales Sur, en Ciudad de México. El Oso publicó un comunicado al día siguiente del suceso señalando que en sus 107 años de historia no han cedido ante las extorsiones del crimen organizado, la competencia desleal y las autoridades corruptas. Motivo por el cual invadieron sus instalaciones, robaron y destruyeron su fuente de trabajo.
Durante el suceso, El Oso perdió más de 20 millones de pesos en equipo y material, además del hurto de dos millones de pesos en efectivo, según mención su representante legal durante una conferencia de prensa unas semanas después.