Luisa María Alcalde, sobre las tensiones entre Adán Augusto y Monreal: “La presidenta les recomendó tener cabeza fría”
La líder de Morena reconoce que no lograron que se retractara ninguno de los coordinadores de las acusaciones que se hicieron
Luisa María Alcalde, dirigente nacional de Morena, se ha subido al torbellino que han ocasionado Adán Augusto López y Ricardo Monreal, los líderes de Morena que mueven los hilos en el Congreso mexicano. Alcalde, que tomó recientemente las riendas del partido fundado por Andrés Manuel López Obrador, ha atizado al debate sobre las presuntas irregularidades en el Senado, denunciadas por Adán Augusto López, que apuntan al coordinador de la bancada, Ricardo Monreal, su antecesor en el cargo. “No convencimos a nadie de desistirse. Si hay irregularidades detectadas tienen que presentarse las denuncias, no hacerlo es un delito. Si detectas una irregularidad y no presentas la denuncia te vuelves cómplice de ese posible desvío de recursos”, es la respuesta de la dirigente a los cuestionamientos sobre si el cierre de filas y el apretón de manos había hecho desistir al coordinador de los senadores de presentar las denuncias penales y administrativas por el puñado de contratos presuntamente irregulares que apuntan al desvío de recursos y a empresas fantasma vinculadas a Monreal. “No puede haber impunidad en ningún caso, se trate de quien se trate”, lanzó.
La dirigente asistió a la reunión que este lunes encabezó la presidenta, Claudia Sheinbaum, con ambos coordinadores y la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, un cónclave para apagar ipso facto la incipiente crisis que ocasionaron al enzarzarse públicamente en un fuego cruzado de acusaciones que pone en entredicho el discurso de unidad y anticorrupción que pregona la autonombrada Cuarta Transformación. “No solamente es dañar a Morena, sino proteger el proyecto de país que representamos. Se va a mantener la unidad y vamos a cerrar filas”, sostuvo la dirigente en una reunión con medios de comunicación.
Alcalde ha dado algunas pinceladas de la reunión, que terminó con una instantánea de ambos coordinadores y la secretaria de Gobernación como símbolo de unidad. “Les recomendó la presidenta tener cabeza fría, no calentar los ánimos, no encenderse”, detalló la líder del partido en el poder. La dirigente se ha mostrado con voluntad y disposición de responder a los cuestionamientos de la prensa, enfocados todos al encontronazo de los pesos pesados del movimiento que predica con un centenar de postulados cómo debe ser un buen morenista. No se debe tener apego al dinero ni al poder, se lee en el undécimo de los dogmas de la agrupación política. “Se resolvieron las diferencias y vamos a caminar todos juntos. No van a encontrar mayores diferendos, se trazó la ruta de lo que nos interesa”, recalcó la líder partidista.
Alcalde ha puesto sobre la mesa las consecuencias de no cumplir con los 100 principios éticos de Morena que en primera instancia son: no robar, no mentir y no traicionar. La nueva dirigencia del partido, a través de la Comisión de Honestidad y Justicia, actuará de oficio en los casos que lo ameriten, cuando se considere que hay incumplimiento a los principios básicos de Morena, dijo Alcalde. “No significa hacerse de la vista gorda. Tenemos toda la intención de que se trate de una comisión activa que actúe no solo a partir de denuncias, sino incluso de oficio, abriendo estos procesos de vigilancia. No es una cacería de brujas, pero sí es un mecanismo que nos ayuda a nosotros a que se proteja la actuación de nuestras autoridades frente a los principios de Morena”, lanzó.