Luna de castor: cómo y cuándo ver la Luna llena que despide noviembre
La tercera Luna llena del otoño y la penúltima del año recorrerá la bóveda celeste acompañada de Júpiter durante las próximas noches
Las últimas noches de noviembre serán testigos de la duodécima Luna llena del año. Al caer la tarde del 27 noviembre y durante los dos días siguientes, el satélite natural de la Tierra aparecerá por el horizonte a partir de las 18.00 horas (tiempo de México). Será el inicio de un recorrido que acompañará Júpiter, el gigante gaseoso y joya del Sistema Solar convertido en el segundo objeto más brillante de la bóveda celeste; y Urano, im...
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Las últimas noches de noviembre serán testigos de la duodécima Luna llena del año. Al caer la tarde del 27 noviembre y durante los dos días siguientes, el satélite natural de la Tierra aparecerá por el horizonte a partir de las 18.00 horas (tiempo de México). Será el inicio de un recorrido que acompañará Júpiter, el gigante gaseoso y joya del Sistema Solar convertido en el segundo objeto más brillante de la bóveda celeste; y Urano, imperceptible a simple vista.
La Luna llena de noviembre, la tercera del otoño en el hemisferio norte, es conocida popularmente como Luna de castor o Luna de escarcha, una denominación empleada cada vez con más fuerza con fines de divulgación por la NASA y el Real Observatorio de Greenwich, y cuyo origen se remonta al Almanaque del Granjero de Maine, una publicación de la década de los treinta que recopiló los distintos nombres con los que los pueblos nativos americanos llamaban al satélite natural de la Tierra tras su aparición en la bóveda celeste mes tras mes. De acuerdo con el Real Observatorio de Greenwich, no existe un consenso sobre las causas que provocaron que los primeros pobladores de Norteamérica conocieran al plenilunio de noviembre como Luna de castor; sin embargo, está relacionado tanto con el aumento de la actividad de estos mamíferos en la construcción de diques y madrigueras en ríos y arroyos de cara al invierno, como con el inicio de una temporada que resultaba fructífera para su caza.
A unos 378.00 kilómetros de la Tierra, en contraste con los 384.400 kilómetros que separan en promedio a ambos astros, la Luna llena de noviembre no lucirá más grande ni brillante que el resto de plenilunios (habrá que esperar hasta el 9 de febrero de 2024 para volver a ver una superluna). No obstante, el mejor momento para tomar fotografías o videos será inmediatamente después de su aparición al caer la noche, cuando la dispersión de la luz en la atmósfera le dota de una tonalidad ocre y su cercanía con objetos terrestres como árboles, edificios y montañas provoca un efecto óptico que parece aumentar su tamaño.
Una Luna acompañada de un halo
En ocasiones, las lunas de los meses más fríos del año pueden aparecer rodeadas de un círculo luminoso: se trata de un halo lunar, un fenómeno meteorológico causado por la refracción de la luz en diminutos cristales de hielo concentrados en cirrus, una clase de nubes finas que se forman en la parte alta de la atmósfera. Los halos son más frecuentes en las áreas polares y producen un anillo iridiscente alrededor del Sol o la Luna; sin embargo, también pueden ser visibles en las noches de otoño e invierno desde México y otras latitudes cercanas al Ecuador.
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