Pedro Almodóvar explica por qué Pedro Pascal y Ethan Hawke fueron perfectos para ‘Extraña forma de vida’
El director español profundiza en su selección de actores para el aclamado cortometraje que actualmente se encuentra en cines
Extraña forma de vida, el nuevo cortometraje de Pedro Almodóvar que debutó en el Festival de Cine de Cannes en mayo de este año, representa un desafío emocionante para el realizador, ya que es su segundo trabajo en un idioma diferente al español y su primera incursión en un escenario inspirado en los wésterns de la antigua Hollywood. A través de esta obra, el director continúa explorando temas recurrentes en su filmografía, como las complejas relaciones románticas, el pasado y la traición....
Extraña forma de vida, el nuevo cortometraje de Pedro Almodóvar que debutó en el Festival de Cine de Cannes en mayo de este año, representa un desafío emocionante para el realizador, ya que es su segundo trabajo en un idioma diferente al español y su primera incursión en un escenario inspirado en los wésterns de la antigua Hollywood. A través de esta obra, el director continúa explorando temas recurrentes en su filmografía, como las complejas relaciones románticas, el pasado y la traición.
El cortometraje, con una duración de apenas 31 minutos, se considera la “respuesta” de Almodóvar a la película Secreto en la Montaña, un proyecto que rechazó hace más de 15 años y que finalmente fue dirigido por Ang Lee. Su razón para rechazarlo fue clara: a pesar de contar una historia de amor homosexual, carecía del elemento sexual que, para el cineasta, era esencial para narrar el romance protagónico. Con Extraña forma de vida, el director español se aventura a crear su propia historia, plasmando su visión de manera más auténtica y fiel a su estilo.
El trabajo presenta al Sheriff de un pueblo pequeño en medio del desierto (Hawke), quien recibe aviso de que Silva, un amigo de su juventud (Pascal) ha vuelto al pueblo sin ninguna explicación. Después se revela que los dos hombres tienen intereses distintos alrededor de un caso criminal en el que un joven asesinó a una mujer. Mientras navegan el conflicto, ambos recuerdan el romance apasionado que tuvieron en el pasado. Silva parece más ansioso de recordarlo, pero Jake definitivamente prefiere dejar su historia atrás.
Almodóvar profundizó con EL PAÍS sobre la elección de Ethan Hawke y Pedro Pascal para los roles principales. El director describió a los personajes del Sheriff Jake y Silva en su guion como un retrato absoluto de estos dos talentosos actores. Expresó también su alegría por su participación, ya que necesitaba a dos actores que fueran completamente opuestos, incluso en términos físicos, y que representaran dos culturas distintas. En sus propias palabras, “Uno es frío, anglosajón hermético, y el otro es lo contrario: cálido, truculento… sin temor a hablar de sus deseos”. Para el director, Pascal y Hawke eran la elección perfecta: “Son perfectos para los papeles”, y dice sobre su trabajo en pantalla: “Los dos son soberbios”.
El realizador de clásicos como Todo sobre mi madre y Mujeres al borde de un ataque de nervios también se mostró entusiasmado por la oportunidad que este proyecto brindaba a Pedro Pascal para demostrar su versatilidad como actor. Reconoció que la mayoría de los éxitos de Pascal habían llegado a través de interpretaciones de papeles épicos (como se vio en las series de HBO Game of Thrones y The Last of Us, que carecían de la ternura que este nuevo personaje requería. Almodóvar consideró que esta película le permitiría a Pascal mostrar su rango actoral de manera diferente.
En cuanto a Ethan Hawke, Almodóvar admitió que el actor superó sus expectativas. Aunque notó diferencias en la forma de trabajar entre los actores de Hollywood y los españoles, se adaptaron para colaborar de la mejor manera posible. El director de Madres Paralelas, una película que tuvo dos nominaciones a los Oscar, mencionó que hizo que ensayaran más de lo que estaban acostumbrados, y frente a la cámara, ambos actores demostraron un crecimiento sorprendente con respecto a los ensayos. La experiencia de trabajar con ellos fue, en palabras del director, “fantástica”.
El cortometraje —que actualmente se encuentra en las salas de cine— es una digna adición a la filmografía de Almodóvar, y muestra su interés por explorar distintas formas de narrar historias. Aunque a momentos el escenario wéstern se siente poco verosímil y la tensión entre los actores podría incrementarse con una más amplia duración, en 30 minutos cuenta una historia sólida con un mensaje muy claro y que nos recuerda la misión constante del director: mostrarnos distintas “extrañas formas de vida”, y hacernos sentir las mismas emociones que sus protagonistas.
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