México vuelve a pedir visa a los brasileños para regular la migración a Estados Unidos
Los turistas provenientes de Brasil deberán presentar su visa mexicana a partir del 11 de diciembre para poder entrar al país
México ha suspendido este viernes el acuerdo con Brasil que eliminaba el requisito mutuo de visa con fines de turismo. A partir del 11 de diciembre, los brasileños que quieran visitar el país deberán presentar su visa mexicana. La nueva medida busca regular el tráfico migratorio hacia Estados Unidos debido a que se ha identificado “un incremento sustancial” de brasileños que ingresan a México con una finalidad distinta a la permitida a los visitantes sin permis...
México ha suspendido este viernes el acuerdo con Brasil que eliminaba el requisito mutuo de visa con fines de turismo. A partir del 11 de diciembre, los brasileños que quieran visitar el país deberán presentar su visa mexicana. La nueva medida busca regular el tráfico migratorio hacia Estados Unidos debido a que se ha identificado “un incremento sustancial” de brasileños que ingresan a México con una finalidad distinta a la permitida a los visitantes sin permiso para trabajar, según ha advertido la Secretaría de Gobernación (Segob).
“Esta decisión obedece al incremento de flujos irregulares [de migración] y a que de manera lamentable, grupos delictivos lucran, con base en engaños, del interés de nacionales brasileños por migrar de manera irregular a Estados Unidos a través de México”, detalla un comunicado en conjunto de la Segob y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). El nuevo acuerdo ha sido publicado este viernes en el Diario Oficial de la Federación y entrará en vigor dentro de 15 días.
En los filtros migratorios, las autoridades han detectado irregularidades como “la identificación de personas cuyo perfil no se ajusta al del visitante o turista genuino y presentan inconsistencias en su documentación o información”, lo que ha robustecido “la posibilidad de que un número significativo de personas que pretendan utilizar la supresión de visa indebidamente”, expone el documento.
La medida contribuirá al combate de las redes de tráfico ilícito de personas, afirma el Gobierno. “Ante el desafío que representa salvaguardar los derechos humanos de los migrantes, México decidió adoptar esta importante decisión, sin menoscabo del intercambio legítimo de flujos de nacionales de ambos países con fines de turismo, culturales y de negocios”, expone. La medida no tiene una vigencia definida, pues el decreto anterior solo ha sido suspendido temporalmente.
Los brasileños que viajen vía terrestre o marítima deberán tramitar la visa física correspondiente ante las autoridades consulares mexicanas, señala el acuerdo. Mientras que quienes ingresen al país vía aérea, podrán hacerlo de manera virtual. “El Gobierno mexicano otorgará facilidades migratorias a quienes ingresen al país vía aérea, a través del llenado con la debida antelación al viaje de un formulario conocido como Autorización Electrónica, que se podrá obtener de manera gratuita en el portal de la Secretaría de Relaciones Exteriores y del Instituto Nacional de Migración”, indica el documento.
No requerirán presentar el formulario ni la visa mexicana, quienes cuenten con un documento que acredite su residencia permanente en Canadá, Estados Unidos, Japón, Reino Unido o cualquiera de los países que integran el Espacio Schengen o la Alianza del Pacífico, puntualiza. Tampoco deberán presentar mayores requisitos quienes tengan una visa válida y vigente de Canadá, Estados Unidos, Japón, Reino Unido o de cualquiera de los países que integran el Espacio Schengen.
El Gobierno también ha informado de que trabaja “en estrecha coordinación con las autoridades brasileñas para promover la migración regular y documentada”, por lo que prevé llevar a cabo consultas bilaterales para evaluar el impacto de esta medida en un plazo no mayor a seis meses. La migración segura, ordenada y regular podría permitir “en su momento, reactivar la supresión de visa”, afirma. El acuerdo entre México y Brasil para la supresión de visas en pasaportes ordinarios se firmó el 23 de noviembre de 2000 en la ciudad de Brasilia y entró en vigor el 7 de febrero de 2004.
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