Hombres armados incendian el Baby’O, la discoteca más emblemática de Acapulco
El dueño del local, Eduardo Cesarman, denuncia que tres sujetos forzaron la entrada, atacaron al vigilante y prendieron fuego al lugar, donde no hay víctimas mortales
El Baby’O, el antro más conocido de Acapulco (Guerrero) ha terminado sus días de gloria consumido por el fuego. De aquel lugar decorado como una cueva y rodeado de palmeras, hoy no queda más que un amasijo negro y chamuscado de mesas, sillas y alfombras quemadas en el interior. Aunque las autoridades todavía no determinan qué pudo generar el incendio, su dueño, Eduardo Cesarman, sostiene que fue provocado y que el local ha quedado en la ruina. “Pérdida total”, han sido sus palabras. Los daños han sido todos materiales y no ha habido ninguna v...
El Baby’O, el antro más conocido de Acapulco (Guerrero) ha terminado sus días de gloria consumido por el fuego. De aquel lugar decorado como una cueva y rodeado de palmeras, hoy no queda más que un amasijo negro y chamuscado de mesas, sillas y alfombras quemadas en el interior. Aunque las autoridades todavía no determinan qué pudo generar el incendio, su dueño, Eduardo Cesarman, sostiene que fue provocado y que el local ha quedado en la ruina. “Pérdida total”, han sido sus palabras. Los daños han sido todos materiales y no ha habido ninguna víctima mortal, solo la intoxicación por inhalación de humo del vigilante que también fue atendido por un shock nervioso como consecuencia del allanamiento.
De acuerdo a la versión del dueño, la noche del miércoles tres hombres armados entraron a la fuerza por una puerta trasera, encañonaron al vigilante, derramaron unos bidones con líquido inflamable y prendieron fuego al lugar. Uno de los sitios icónicos de la ciudad turística que vio atravesar por sus puertas a lo más selecto de la alta sociedad mexicana y la jet set internacional. “Baby’O donde ves y te ven”, fue el lema de la famosa discoteca desde hace casi 50 años. Luis Miguel, Michael Jordan, Carolina de Mónaco, Ringo Starr, Pierce Brosnan, Julio Iglesias, Elizabeth Taylor... todos querían ver y ser vistos entre aquellas cuatro paredes.
El secretario de Protección Civil del Estado, Marco César Mayares, ha señalado ante la prensa local que se están investigando las causas del incendio para valorar las pérdidas materiales. “Lo fueron a quemar y no se vale que quieran tapar el sol con un dedo”, ha señalado Cesarman en entrevista con Joaquín López Dóriga, ante los señalamientos de que pudieron ser los propios dueños los responsables del incendio. “¿Para qué lo vamos a quemar? El lugar estaba listo para abrirse, lo llevamos manteniendo año y medio”, ha añadido el propietario. El Baby’O permaneció cerrado 18 meses como consecuencia de la emergencia sanitaria por la covid-19 y hace poco había vuelto a abrir para ofrecer comida y bebida los fines de semana. Al menos 80 familias dependían del negocio.
Mientras las preguntas sobre el siniestro se agolpan, las autoridades continúan en silencio. La destrucción del Baby’O llega en pleno cambio de gobierno municipal tras las elecciones de junio pasado. Esclarecer lo sucedido, será responsabilidad de la nueva alcaldesa, Abelina López, del partido Morena.
El ataque vuelve a colocar sobre la mesa los índices de inseguridad que vive la ciudad y la extorsión de empresarios hoteleros y restauranteros por parte del crimen organizado. “Nunca hemos recibido amenazas de derecho de piso ni de nadie”, asegura Cesarman. “Nuestra vida en Acapulco no incluye delincuencia, menos delincuencia organizada. Para nosotros Acapulco es un lugar pacífico”, recalca el dueño del exclusivo lugar donde las balas no rozaban los muros hechos con arena de playa. Al menos hasta ahora.
Los empresarios están a la espera de que tanto los bomberos como la aseguradora evalúen los daños. “Ni siquiera tenemos seguro contra este tipo de incidentes. Tenemos seguro contra robo, responsabilidad civil, pero para este tipo de incendio no. Para incendios provocados no hay seguro”, ha respondido en la entrevista. La Fiscalía del Estado de Guerrero tiene abierta una investigación con la que se busca esclarecer los hechos.
Después de la pérdida total del interior, Cesarman y sus socios evalúan si el local volverá a abrir para el mes de diciembre o desaparecerá para siempre. “Necesitamos un tipo de garantía de que esto no va a pasar de nuevo, imagínate que pase con el lugar lleno. Es un tema de responsabilidad social. Si no hay seguridad para el negocio y la clientela, no tenemos interés en volver a abrir”, ha respondido de manera contundente.
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