Bukele ofrece a Trump su megacárcel para criminales capturados en Estados Unidos
Durante la visita de Marco Rubio, el Gobierno salvadoreño también anunció que impulsará un proyecto de energía nuclear con Washington
Los gobiernos de Estados Unidos y El Salvador firmaron este lunes dos acuerdos con implicaciones de impacto para toda la región: por un lado, el país centroamericano se comprometió a recibir en sus cárceles a criminales capturados en Estados Unidos, incluyendo a ciudadanos estadounidenses. Y por el otro, Washington se comprometió a impulsar a El Salvador en el desarrollo de energía nuclear.
“Hemos ofrecido a los Estados Unidos de América la oportunidad de externalizar parte de su sistema penitenciario”, escribió el presidente Nayib Bukele en su cuenta de X. “Estamos dispuestos a admitir únicamente a criminales convictos (incluidos ciudadanos estadounidenses convictos) en nuestra mega prisión (CECOT) a cambio de una tarifa. La tarifa sería relativamente baja para Estados Unidos, pero significativa para nosotros y haría sostenible todo nuestro sistema penitenciario”.
Los acuerdos se dieron en el marco de la visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, al país centroamericano como parte de su primera gira por la región. Bukele calificó el acuerdo como algo “sin precedentes”, mientras que Rubio destacó al presidente salvadoreño como un líder “consecuente” con los intereses del país norteamericano.
El Salvador cuenta con la cárcel más grande de América Latina, el Centro de Confinamiento para el Terrorismo (CECOT), donde guardan prisión más de 20.000 pandilleros de la Mara Salvatrucha 13 y el Barrio 18, las dos pandillas más poderosas de la región que fueron desarticuladas por Bukele. Según información proporcionada por Bukele, el recinto tiene capacidad para 40,000 reos. Hasta la fecha, no se sabe con exactitud cuántos cupos quedan disponibles.
De acuerdo con el sitio especializado World Prision Brief, El Salvador es el país con mayor tasa de encarcelamiento del mundo, con 1.659 personas presas por cada 100.000 habitantes. Esta cifra duplica con creces al segundo lugar, Cuba, que actualmente tiene 794 prisioneros por cada 100.000 habitantes.
Hasta el momento, el Gobierno no ha explicado su estrategia para recibir a delincuentes de estructuras criminales ajenas ni qué medidas tomará para reforzar la seguridad de la megaprisión.
Desde 2022, el presidente Bukele disparó su popularidad luego de impulsar un brutal régimen de excepción, por el que capturó a más de 80.000 personas sin darles oportunidad de una defensa justa. Organismos de defensa de derechos humanos han denunciado más de 3.000 detenciones injustificadas y más de 300 muertes de reos sin juzgar dentro de los centros penitenciarios desde que inició la medida.
Esta ha obtenido la aprobación de la población salvadoreña en medio de muchas críticas, pero además de otros mandatarios de la región. Rubio destacó la reducción de la violencia durante su encuentro con Bukele en su residencia ubicada en el lago de Coatepeque, una de las zonas más exclusivas de El Salvador.
Un acuerdo sobre energía nuclear
Por otra parte, Rubio se refirió al pacto de cooperación para impulsar la energía nuclear en El Salvador como su primer acuerdo firmado como secretario de Estado, y dijo que, con él, Estados Unidos busca que el país centroamericano sea un lugar “donde todas las tecnologías, todas las industrias, todas las promesas de este nuevo siglo puedan encontrarse”.
El acuerdo, nombrado Memorando de Entendimiento sobre Cooperación Nuclear Civil Estratégica (NCMOU), fue firmado por la contraparte salvadoreña, la canciller Alexandra Hill Tinoco, quien dijo que se trata de “una estrategia más” del presidente Bukele para “dar energía las 24 horas al día a un precio competitivo sin depender de la geopolítica ni de los precios del petróleo”.
Las autoridades tampoco dieron mayores explicaciones sobre este nuevo acuerdo. En el último mes, la población salvadoreña ha rechazado el retorno de la minería metálica luego de siete años de prohibición por sus implicaciones negativas en el medio ambiente. Bukele, por su parte, se ha hecho de oídos sordos ante las protestas que incluyen pronunciamientos de la iglesia católica, respaldados en estudios científicos generados por el mismo Gobierno. El mandatario ha asegurado que, con el dinero que perciban de la minería metálica, limpiarán los ríos que sean contaminados.
La visita de Rubio a El Salvador era la segunda parada del secretario de Estado en su primer viaje oficial, que también le ha llevado a Panamá. El martes, a las 7.15 de la mañana, tiene previsto volar a Costa Rica y de allí irá a Guatemala y República Dominicana.