“La marcha de las canas”: el Gobierno invoca su reforma pensional para alimentar sus movilizaciones

Este jueves están convocadas movilizaciones en favor del Gobierno de Gustavo Petro. No es la primera vez que el Ejecutivo llama a sus seguidores a la calle, pero esta vez presenta un argumento diferente, que invoca un logro de su Administración. “Ante los intentos por desestabilizar al Gobierno del cambio y por tumbar la reforma pensional, llamamos a la marcha de las canas, invitando al conjunto del pueblo a defender una de las mayores conquistas sociales en la historia reciente de nuestro país”, argumentó el Pacto Histórico, la coalición de partidos y movimientos de izquierda por la que fue elegido presidente de Colombia, que convoca a marchar este jueves a las 10 de la mañana. “El Poder del Pueblo es fundamental para defender los logros sociales alcanzados con el Gobierno del cambio, especialmente la reforma pensional, que es el mayor hito en la historia del trabajador colombiano”.

Las manifestaciones se dan cuando Petro viene denunciando un “golpe blando” en su contra, señalando a los políticos, la oligarquía o los jueces de participar en maniobras ilegales para sacarlo del poder e incluso denunciando un atentado en ciernes contra su vida. Pese a ello, la actual convocatoria a llenar calles y plazas en su apoyo no solo se asienta sobre la necesidad de rodear al presidente. Tanto así que en redes sociales al tradicional eslógan “no pasarán” se han sumado “La pensional se defiende” y “Marcha de las canas”.

Hasta ahora, la galvanización iba de la mano de la promesa de cambios por venir y no de un avance legislativo. Aunque la reforma pensional hasta ahora se empieza a aplicar y consiste en una modificación del sistema para todos los colombianos, los aliados del Gobierno recuerdan que crea un pago mensual orientado a sacar de la miseria a 500.000 adultos mayores, y que se prevé que en 2025 ya serán tres millones los beneficiarios. Ese subsidio, conocido como pilar solidario en la ley, hasta ahora se empieza a aplicar, y no ha sido objeto de las críticas de los opositores a la reforma. De hecho, de quien se requeriría defenderla no es de la derecha, los grandes empresarios o las mafias, usuales blancos de los miembros del Pacto, sino de los magistrados. “Enfrenta más de 100 demandas en la Corte Constitucional”, recuerda la convocatoria.

La movilización alrededor de la pensional no es una idea nueva, como tampoco lo es el nombre “marcha de las canas”. Viene desde agosto, convocada por el petrista Gustavo Bolívar y con el apoyo explícito del presidente.

La fecha de la convocatoria se fue ajustando. Quienes llamaron inicialmente a movilizaciones este jueves fueron las grandes centrales sindicales, las estructuras más tradicionales de la izquierda colombiana. Lo hicieron el lunes 9 de septiembre, no en defensa de la reforma pensional sino en apoyo del presidente, que el día anterior había señalado ser víctima de un “golpe de Estado a la colombiana”. Se refería a la investigación que adelanta el Consejo Nacional Electoral en su contra por presuntas irregularidades en los gastos de su campaña presidencial, una decisión arropada por una decisión del Consejo de Estado, pero que Petro ha señalado de violar su fuero constitucional como presidente.

Fue solo dos días después, el miércoles, cuando esa convocatoria se unió con la marcha de las canas. Bolívar, director del Departamento de Prosperidad Social y fallido candidato oficialista a la Alcaldía de Bogotá hace un año, retomó su vieja idea, y enmarcó el llamado ya no solo como una respuesta a las alertas presidenciales, sino como una defensa de un logro tangible del Gobierno. La bandera, que permite ampliar el llamado más allá de las bases más activas del petrismo, tomó tracción. Y desde este lunes, como reveló Caracol Radio, las entidades del Ejecutivo coordinaron sus mensajes por orden de la Presidencia, para incentivar ese llamado en las redes sociales con la etiqueta #LaPensionalSeDefiende.

El éxito de esa estrategia ser verá este jueves, en la que será la cuarta jornada de marchas convocada por el Gobierno. Las más recientes, la del Primero de Mayo pasado, eran un pulso directo frente a la oposición, que había movilizado más de 400.000 colombianos en su contra tan solo 10 días antes. La puja se saldó en tablas, con Petro llenando la Plaza de Bolívar de Bogotá y dando un discurso aguerrido en defensa de la que era su gran apuesta legislativa, la reforma a la salud. La pensional, que ahora es el eje, ocupaba un segundo lugar. Tan solo cuatro meses y medio más tarde, tras la fuerte derrota por el hundimiento de la primera reforma en el Senado y la victoria por la aprobación de la segunda, el orden de prioridades es el contrario. La misma y céntrica plaza bogotana, y decenas de espacios similares en otras ciudades, serán testigos del impacto que pueda tener ese cambio en la capacidad de convocatoria del Gobierno. O de si, como muestran las encuestas, lo que tiene es el respaldo de grupos sólidos, movilizados y activos que pueden no reflejar a las mayorías pero que, superado el meridiano del cuatrienio, no desfallecen.

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