Álvaro Uribe y Gustavo Petro se sientan en la misma mesa
La reunión entre el expresidente y el mandatario electo, impensable hace unos meses, se celebró este miércoles en Bogotá
Gustavo Petro quiso irse a unos días de descanso con la tarea adelantada. Antes de tomar un avión rumbo a España, el mandatario electo se reunió este miércoles con el expresidente Álvaro Uribe. La cita se confirmó públicamente el pasado viernes, cuando Uribe aceptó la invitación de Petro, que busca un diálogo nacional que incluya al Centro Democrático, el partido del expresidente. Menos de una semana después estaban los dos sentados en la misma mes...
Gustavo Petro quiso irse a unos días de descanso con la tarea adelantada. Antes de tomar un avión rumbo a España, el mandatario electo se reunió este miércoles con el expresidente Álvaro Uribe. La cita se confirmó públicamente el pasado viernes, cuando Uribe aceptó la invitación de Petro, que busca un diálogo nacional que incluya al Centro Democrático, el partido del expresidente. Menos de una semana después estaban los dos sentados en la misma mesa. Uribe, que no está acostumbrado a moverse de su hacienda El Ubérrimo para casi ninguna reunión, viajó a Bogotá para cumplir la cita con el líder del Pacto Histórico.
El encuentro duró poco más de dos horas y tuvo lugar en la oficina del abogado de Gustavo Petro, Héctor Carvajal. El expresidente y Petro estuvieron a solas por cerca de 30 minutos. Luego se sumaron, Alfonso Prada, jefe de debate de la campaña presidencial de Petro. Del lado de Uribe, el senador Ciro Ramírez, Alirio Barrera, Nubia Stella Martínez y el representante Juan Fernando Espinal. Todos del Centro Democrático, su partido político.
En medio de la reunión, la imagen de ambos sentados en la misma mesa, frente a frente, fue compartida por el equipo de prensa de Petro, y un par de horas después por él mismo. La foto es histórica y se suma al álbum de imágenes de lo que parece una nueva era en Colombia. La izquierda llegará por primera vez al poder y dos de los hombres que han protagonizado la historia política reciente, desde orillas completamente opuestas, se sientan a hablar y se escuchan.
Uribe, situado en las antípodas ideológicas de Petro, con quien se ha enfrentado desde siempre, intentó forjar el año pasado una alianza “antipetro”, que llamó “Ojo con el 22″, en alusión a las elecciones de este año. No parece ahora que quisiera seguir en ese tono. Uribe calificó el encuentro de hoy como “franco”, y anunció que su partido apoyará los proyectos del Ejecutivo de Petro que crean que son buenos para el país. “Se hará una oposición razonable a lo que considere problemático”, dijo el expresidente, que se le vio como hacía muchos meses no aparecía: rodeado de micrófonos, en el centro de la atención. Él mismo reconoció que en la campaña presidencial apenas estuvo presente. Ningún candidato, ni Fico Gutiérrez ni Rodolfo Hernández, quisieron aparecer con él en una foto. “Mi situación es difícil y nuestro partido, que tanto queremos, era el primero en el Senado y hoy es el cuarto”, dijo Uribe, que aseguró que su principal petición al nuevo presidente es poder tener un canal de diálogo directo con él. “Será para hablar del país. Si hay temas en los que pueda servir nuestro concepto, que cuente con nosotros y en los que tengamos discrepancia, habrá una oposición razonable. Este (el Centro Democrático) es un partido político democrático”, reiteró Uribe.
Petro, que prefirió dejar en manos del expresidente el balance del encuentro ante la prensa, trinó un breve mensaje: “Ojalá el país pueda ver el escenario del diálogo de las diferencias. La conversación con el expresidente Uribe fue provechosa y respetuosa. Encontramos las diferencias y los puntos comunes. Siempre habrá un diálogo gobierno/ oposición”.
El expresidente no ofreció muchos detalles del encuentro. Dijo que había mostrado su preocupación por medidas fiscales que puedan afectar al sector privado. “Nos parece bien en que el país avance para que los colombianos tengan un ingreso digno. Pero que no se marchite al sector productivo. Compartimos todo el esfuerzo que se haga para que este país acelere la superación de la pobreza, pero eso no debe ser al costo de marchitar al sector privado, porque esa política se volvería insostenible y nos llevaría a más pobreza”, dijo Uribe. Según él, buena parte del encuentro giró alrededor de las fuerzas militares. “Este partido seguirá hablando a favor de los soldados”, aseguró. “Yo insistí en una tesis nuestra de la necesidad de reformar la JEP para darle un tratamiento realmente diferente a los integrantes de las Fuerzas Armadas”.
Uribe no tendrá una silla en el Congreso que se instala el próximo 20 de julio. Su proceso judicial por presunta manipulación de testigos lo obligó a hacerse a un lado y no participar. Pero su figura sigue siendo la más relevante de la derecha y de su movimiento, el Centro Democrático, que mantiene una importante presencia en el Senado y la Cámara.
El uribismo vuelve a escena
Petro dio el primer paso para el acercamiento con Uribe. Al menos 15 días antes de la segunda vuelta electoral (el pasado 19 de junio) buscaba una reunión con el líder de la derecha. Pero no fue tan fácil, como el mismo Uribe lo ha reconocido, su partido no pasa por el mejor momento, y tuvo que pensar en los efectos dentro de las bases del uribismo antes de aceptar. Figuras relevantes como María Fernanda Cabal no se mostraron muy entusiastas con el encuentro entre Petro y su mentor. “Pobre Colombia con un Gobierno de izquierda”, ha dicho Cabal, la senadora más votada del Centro Democrático. Según Cabal, el encuentro de este jueves no es más que un “acto de generosidad”. “Yo sigo sosteniendo que (con Petro) sucede como cuando uno se acerca a un cocodrilo, no se sabe si se está riendo o lo se lo va a comer”, decía la senadora este miércoles a la revista Semana.
El Centro Democrático no logró tener candidato a la presidencia y las dos opciones a las que se aferraron, Gutiérrez y Hernández, se negaron a aceptar públicamente su apoyo”. La impopular presidencia de Iván Duque, que llegó a la Casa de Nariño con este partido político, ha generado divisiones dentro del movimiento y terminó aislando al mismo Uribe de la escena política. Ahora, con la llegada de un nuevo gobierno, reaparece. “El primero que tiene curado el uribismo soy yo, pero lo que no se me cura es el amor por la patria”, dijo este miércoles.
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