El éxtasis de la victoria
Cesc centró a Iniesta y este disparó a puerta. Duró un instante, unas décimas, pero el tiempo se paró en Madrid. Fue eterno e instantáneo a la vez. Luego, una explosión de júbilo como pocas veces se ha visto en esta ciudad. Los cientos de miles de personas que se reunieron en Cibeles, pero también en las plazas, bares y casas de toda la Comunidad, gritaron hasta quedarse roncos.
PABLO DE LLANO | Madrid
Una masa de hinchas se corona con la selección en el paseo de Recoletos
ANNA-MARIA HOLLAIN | Madrid
Los holandeses en Madrid ahogan sus penas con cerveza
EL PAÍS | Madrid
El centro de Madrid fue una marea rojigualda - 'Vuvuzelas', cláxones y bocinas sonaron toda la noche
DAVID MARCIAL PÉREZ | Móstoles
Miles de mostoleños celebraron enfervorecidos cada parada de su paisano como si fuera un gol