Cuando regresó a la oficina después de la baja por maternidad, su ordenador y su mesa habían desaparecido de la oficina. Elena, nombre ficticio, era una alta directiva de una empresa industrial mediana en Barcelona. Una ingeniera que ronda la treintena, con experiencia profesional -no ficticia- en tres países. Buscó una silla y se sentó a esperar al director general. Al llegar, éste le informó de que su papel en la empresa había cambiado.
Los tribunales de lo social van a tener trabajo extra en los próximos meses si los obispos mantienen el criterio de que sus docentes de religión y moral en la escuela pública no tienen derecho a cobrar trienios o antigüedad alguna. Sólo en Madrid se están tramitando ya 200 demandas, algunas próximas a sentencia en la Magistratura de Trabajo. Y de momento ya han logrado que el Gobierno les dé la razón.
Los barcos gasolinera de la bahía de Algeciras no tienen banderas negras con calaveras. Sus marineros no llevan parches en los ojos ni patas de palo, pero son "auténticos piratas de nuestro tiempo", según Antonio Muñoz Secilla, el ecologista que ha conseguido llevar el caso a Bruselas.
ÁNGELES ESPINOSA | Teherán
Teherán cierra nueve revistas de cine y entretenimiento portemor al ejemplo de las "estrellas corruptas" occidentales