Una luz para la selección nacional de rugby femenino

Karina Landeros Solorio (Guadalajara, 36 años) supo a los 10 años que había una diferencia. Desde muy pequeña se interesó por el deporte y empezó a distinguirse a través de la ropa para jugar. “Yo traía mi vestido”, recuerda. “Todos los hombres traían shorts o su pantalón con tenis y yo tenía mi vestido, con mi moño amarrado y mis zapatos”, reafirma. Pero eso no le importaba. Ella jugaba al futbol con los varones en una calle de tierra, quienes la elegían por su destreza y hasta se convirtieron en sus cómplices cuando su mamá no la dejaba jugar por ser mujer. “Ellos me tenían que decir ‘¡viene tu mamá, viene tu mamá!’, entonces yo corría de la cerrada donde jugábamos al otro lado, le daba la vuelta a la calle y entraba a mi casa”, recuerda. Su mamá, al regresar, le preguntaba dónde había estado. “¡Aquí en casa!”, le decía. “Claro, que chapeteada y sudada, no me creía”.

Esa calle de tierra, en la colonia Lomas del Paraíso de Guadalajara, la trae ahora a otro camino de tierra empantanado que lleva al deportivo FC Total, en Querétaro, para participar en el Rugby Americas North (RAN). Hoy Karina es la capitana de las Serpientes, la Selección Nacional de Rugby Femenino, que acaba de clasificar en el ranking internacional de World Rugby, organismo que dirige a las federaciones globales.

También es el primer torneo oficial de las seleccionadas bajo el programa DestElla de Iberdrola México, que presentaron en junio y busca apoyar al deporte femenino, en este caso como aliado de las Serpientes.

En conferencia de prensa desde las instalaciones de FC Total, Alicia Valcarce, directora de la Fundación Iberdrola México y encargada de entregar los nuevos uniformes a la selección femenina, dijo que este campeonato “simboliza el arranque sobre el terreno de nuestra alianza con la Federación Mexicana de Rugby (FMRU) y es la expresión de la excelencia y el esfuerzo de estas jugadoras”.

El apoyo de la compañía de energía va más allá de los uniformes. También ofrecen equipamiento y acceso a instalaciones de entrenamiento, como gimnasios. Es un deporte poco popular en el país, pero muy importante para sus jugadoras. “Nunca habíamos recibido un apoyo de manera tan integral y enfocado a las mujeres, con el objetivo de generar esta equidad de género, poniendo además todos los recursos humanos, materiales y económicos disponibles para que, entre la Federación e Iberdrola México, podamos dar lo mejor de nosotras. Para nosotras significa todo, significa esperanza, significa chispa, significa salir al campo, respirar y acordarnos de este momento”, comentó en la conferencia Isabela González, subcapitana de la selección.

Por su lado, Karina, con la responsabilidad de ser la capitana y la jugadora de mayor edad en el grupo, se emociona al hablar en la conferencia. “Este torneo es muy especial y es muy emocional para mí porque representa 10 años de rugby”, cuenta con la voz quebrada. “Representa sueños cumplidos, porque soy la más grande ahorita de todas las chicas. Que haya llegado a este momento antes de mi partida como jugadora y dar el paso como coach, es especial. Espero seguir ayudando a contagiar mi pasión por el rugby, que tanto me ha dado en mi vida profesional, personal y amorosa”, cuenta Landeros.

El pasado jueves 11 de junio, la selección femenina de rugby se enfrentó en un partido amistoso a su similar de Estados Unidos del Sur, donde las mexicanas perdieron 23 a 25. Sin embargo, el partido que las llevó a entrar en el ranking mundial fue el del domingo 14 de julio, donde las Serpientes se colocaron en el lugar 31 del World Rugby tras vencer 27-0 a Trinidad y Tobago. Los países que lideran el ranking del rugby femenino son Inglaterra, Nueva Zelanda, Canadá, Francia y Australia.

“Agradezco muchísimo que Iberdrola México haya aparecido en nuestras vidas con el programa DestElla”, señaló Ernesto Sainz, presidente de la Federación Mexicana de Rugby (FMRU), durante la conferencia de prensa. “Sobre todo, en la vida de las mujeres rugbiers mexicanas, porque va a cambiar la historia y promover la igualdad. Gracias a su apoyo, hoy tenemos la oportunidad de ranquear en la World Rugby en las mejores condiciones para el equipo”, aseguró.

Karina Landeros Solorio ha presenciado cómo su equipo ha tenido el mayor ascenso en el ranking mundial, un logro importante para las mujeres mexicanas que ahora tienen un camino abierto en este deporte. “Estoy muy feliz, muy satisfecha, emocionada y orgullosa. Yo creo que, así como me costó, para las demás que vengan no va a ser igual, va a ser mucho mejor y eso me emociona mucho, me deja tranquila. Yo pude ver este cambio en 10 años. Las niñas con las que he podido trabajar en procesos anteriores ahora son mis compañeras, están aquí y digo ‘si yo hubiera conocido ese deporte a los 18 años, hubiera sido otra cosa’, entonces estoy satisfecha y orgullosa”, concluye la capitana.

En México hay alrededor de 400 jugadoras de rugby que están afiliadas a la FMRU, pero al menos 1.000 deportistas que practican este deporte todavía carecen de instalaciones deportivas e instructores. Por eso, el objetivo del programa DestElla es aumentar la participación de las niñas y jóvenes a través de activaciones en escuelas y universidades, además de donar uniformes, equipo para entrenar, acceso a los gimnasios y también recursos para hospedaje a las deportistas en las competencias de alto rendimiento.

Para Iberdrola México, este es una muestra del compromiso con cuatro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas: salud y bienestar; igualdad de género, reducción de las desigualdades y las alianzas para lograr estos objetivos.