Opinión

Hay asuntos más importantes que la seguridad

Funcionarios del Gobierno se reúnen en Torreón, pero el asunto de la violencia ni siquiera ha asomado

Una barda con propaganda sobre la consulta de revocación de mandato en México.Victoria Valtierra (Cuartoscuro)

La última vez que el secretario de Gobernación y los altos mandos de la Secretaría de Seguridad y de las fuerzas federales estuvieron en Torreón fue hace casi una década, en marzo de 2013, para discutir temas de seguridad. Nueve años después, varios sucesores de los participantes en esa reunión estuvieron en la ciudad y el tema de la seguridad de la región ni siquiera se asomó.

En marzo de 2013, los primeros meses del Gobierno de Enrique Peña Nieto, Torreón y La Laguna eran la zona metropolitana más violenta del país. Una disputa entre grupos criminales había recrudecido la violencia qu...

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La última vez que el secretario de Gobernación y los altos mandos de la Secretaría de Seguridad y de las fuerzas federales estuvieron en Torreón fue hace casi una década, en marzo de 2013, para discutir temas de seguridad. Nueve años después, varios sucesores de los participantes en esa reunión estuvieron en la ciudad y el tema de la seguridad de la región ni siquiera se asomó.

En marzo de 2013, los primeros meses del Gobierno de Enrique Peña Nieto, Torreón y La Laguna eran la zona metropolitana más violenta del país. Una disputa entre grupos criminales había recrudecido la violencia que llevaba seis años al alza. Tres de los cinco secretarios de Gobernación que tuvo Felipe Calderón habían visitado La Laguna y cada uno de los años que visitaron cerró con más homicidios que el anterior.

Algo cambió ese marzo de 2013. En el mes anterior, grupos criminales habían atacado la casa de la alcaldesa de Gómez Palacio, Durango, la segunda ciudad más grande de la región, y habían secuestrado a cinco trabajadores de El Siglo de Torreón. Cuando la plana mayor del gabinete de seguridad visitó La Laguna se puso en marcha un plan de seguridad que, dirigido por el Ejército, pero con la participación de autoridades estatales y municipales, logró reducir la violencia en unos meses y mantener una baja sostenida durante casi una década.

Es un modelo que el actual Gobierno de Andrés Manuel López Obrador decidió respetar. 2021 cerró con una cifra de homicidios casi 20 veces menor al pico alcanzado en 2012 (57 contra 1.095).

Es un modelo que permitió a altos mandos del gabinete de seguridad reunirse de nueva cuenta en Torreón este sábado y no tocar para nada la situación de seguridad en La Laguna, la coordinación con autoridades locales o las amenazas. Vinieron a ocuparse del asunto más importante para el Gobierno de López Obrador: la consulta de revocación de mandato.

Al margen de discutir sobre la utilidad del ejercicio, la conveniencia de participar o no, o el sentido del voto, temas que quedan a la conciencia de cada ciudadano, ver a funcionarios usando su tiempo para discutir temas menos urgentes resulta por lo menos desconcertante.

Porque no fueron solo mandos políticos, empezando por el titular de Gobernación, Adán Augusto López, y el subsecretario de Seguridad Ciudadana, Ricardo Mejía (quien presumió haber pedido vacaciones para irse a promover la consulta). En la llamada “asamblea informativa” del sábado estuvo también el general Luis Rodríguez Bucio, comandante de la Guardia Nacional y, supuestamente, un profesional de carrera ajeno a asuntos partidistas. La razón por la que sabemos que el general estuvo presente es porque fue presentado por el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado.

Rodríguez Bucio, quien en su tesis de doctorado en seguridad nacional dedica una sección a discutir la falta de capacidad o de voluntad de autoridades locales para enfrentar al crimen, pudo haberle comentado a López Mejía la situación de seguridad en La Laguna, particularmente en Gómez Palacio, donde Morena gobierna desde 2019 y donde los robos violentos y los robos de negocio se triplicaron en el inicio de este año con respecto al pasado.

Rodríguez Bucio podría explicarles por qué el principal bastión de Morena en La Laguna tuvo en los dos primeros meses de 2022 casi cinco veces más robos violentos que Torreón, una ciudad con el doble de habitantes.

Es evidente que hay otras prioridades para los funcionarios. Ahí está el caso del subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía. Como funcionario federal, tenía 32 Estados dónde escoger para irse a promover la consulta de revocación de mandato estos días que pidió vacaciones. Por coincidencia eligió su Estado natal, Coahuila, que tiene elección de gobernador el próximo año. El propio titular de Gobernación se refirió a la importancia de las elecciones en Coahuila (uno de los últimos cuatro estados donde gobierna el PRI).

Quedaron claro los asuntos de importancia para el secretario de Gobernación, el subsecretario de Seguridad y el jefe de la Guardia Nacional, presentes en un acto de legalidad cuestionable tras el fallo del Tribunal Electoral sobre el decreto que legisladores de Morena aprobaron para poder promover la consulta.

La escena me hizo recordar aquel marzo de 2013. Estaban por arrancar las campañas para renovar alcaldías en Coahuila y Durango y solo me imagino lo que hubiera pasado si los funcionarios que viajaron a Torreón, como Miguel Ángel Osorio Chong, entonces titular de Gobernación, Manuel Mondragón, que dirigía la Policía Federal o el general Salvador Cienfuegos, secretario de Defensa, en lugar de tratar temas de seguridad se hubieran ido a un mitin del PRI. López Obrador todavía estaría trepado por las paredes.

Javier Garza Ramos es periodista independiente en Torreón, Coahuila.

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