México retira la prohibición de importar maíz transgénico
El Panel de Solución de Controversias del TMEC resolvió que las restricciones impuestas carecen de fundamento científico y son violatorias de los compromisos comerciales con Estados Unidos y Canadá
México tendrá que dar marcha atrás y retirar las restricciones a la importación de maíz transgénico y el uso del glifosato, en cumplimiento con la resolución emitida en el Panel de Solución de Controversias del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC).
La Secretaría de Economía ha informado que queda suspendido el decreto aprobado en 2023 mediante el que se prohibía la importación de maíz genéticamente modificado, utilizado para el consumo humano. La decisión ha quedado recogida en el Diario Oficial de la Federación (DOF) desde la tarde de este miércoles. “Se elimina la revocación de la autorización del maíz genéticamente modificado destinado al consumo humano. Se suspenden las acciones para la sustitución del maíz genéticamente modificado en los sectores de consumo animal, industrial y humano”, ha señalado Economía.
El panel del TMEC emitió su resolución en diciembre de 2024 y concluyó que las restricciones impuestas por México carecen de fundamento científico y que son violatorias de los compromisos comerciales establecidos en el tratado. “El Panel de solución de controversias emitió su informe final y recomendó a México que ponga sus medidas en conformidad con sus obligaciones en el marco del TMEC”, puede leerse en el DOF. La Secretaría de Economía ha señalado que con el cumplimiento del acuerdo se evitan posibles represalias comerciales, sin embargo, prevé afectaciones en el abasto de maíz y presiones inflacionarias derivadas de la reducción en la producción de maíz blanco.
La medida de protección del maíz mexicano fue impulsada por el presidente López Obrador como parte de la estrategia para promover la autosuficiencia alimentaria y proteger las diferentes variedades de maíz nativo. Sin embargo, la medida, fue duramente criticada por productores, empresarios y socios comerciales por violar el marco regulatorio del TMEC.
El año pasado el Gobierno mexicano ya decidió posponer la prohibición del glifosato ante la falta de una alternativa viable que garantizara el buen desarrollo del sector agrícola en el país. Así que los agricultores pudieron seguir importando el polémico pesticida, utilizado para eliminar las malas hierbas en los terrenos de cultivo. México señaló entonces que no era posible la entrada en vigor del decreto de 2023 en el que se prohibía la compra, venta e importación del glifosato a partir del 1 de abril de 2024. El glifosato fue creado en 1974 por Monsanto y vendido bajo la marca Roundup hasta 2000, año en el que expiró la patente. En la actualidad decenas de empresas lo comercializan y lo exportan a México.