Ascienden a 17 los desaparecidos de una familia en Chilapa de Álvarez, Guerrero

Al menos 17 integrantes de una familia de comerciantes han desaparecido en la zona centro de Guerrero, entre los municipios de Chilapa de Álvarez y Quechultenango. Primero desaparecieron seis, el 21 de octubre. Habían ido vender trastes de cocina a varios pueblos, entre ellos El Epazote. Se trata de Alfonso Francisco Cabrera, de 35 años; José Enrique Francisco Cabrera, de 26 años; Leandro Geovanni Francisco, de 14; Raymundo Santos Francisco, de 13 años; Diego Alonso Sacristán, de 16 años y Abraham Reyes Cayetano, de 15.

Tres días después, varios familiares fueron en su búsqueda y también desaparecieron: Flor Itulia Cabrera, de 53 años y Clara Francisco Cabrera, de 30 años, madres de tres de los menores. Con ellas viajaban Héctor Santos de la Cruz, de 32 años y Mario Francisco Millán, de 49. Hasta el momento tampoco se sabe nada de su paradero. El 27 de octubre se conoció que otros siete familiares más también desaparecieron en la búsqueda: Jaime Cayetano, Pedro Ismael Barrera, Inés Morales, Marco Antonio Barrera, Javier Barrera Millán, Ángel Barrera y Joel Morales Tolentino.

La Fiscalía del Estado activó el Protocolo para la búsqueda de personas desaparecidas y emitió las fichas para su localización. Además ha ofrecido una recompensa de un millón de pesos a quien proporcione información que permita localizarles. Las autoridades por el momento buscan a 16 de las 17 personas, a falta de que se presente una denuncia por desaparición de Joel Morales Tolentino, según informan los medios locales que han hablado con los familiares.

Casi dos semanas después, ni la Fiscalía ni la Gobernadora, Evelyn Salgado, han compartido avances en el caso o se han pronunciado sobre el tema. El viernes pasado se conoció un video en el que uno de los menores secuestrado aparece descalzo y atado de manos. El niño dice que un grupo criminal los envió a la zona para informar de la forma en la que opera otro grupo del crimen organizado.

Guerrero es uno de los Estados más afectados por la violencia y territorio en disputa de varios grupos de la delincuencia. La guerra al crimen y entre los propios delincuentes se ha cobrado miles de víctimas en la región desde hace décadas. De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) alrededor de 16 grupos criminales operan en el Estado. Entre ellos destacan Los Tlacos y Los Ardillos, grupos rivales que se han fortalecido en los últimos años diversificando sus fuentes de ingresos con la tala ilegal y la extorsión a la población.

El rastro de sangre del crimen organizado en el Estado es infinito. Este lunes fue asesinada una familia de cinco personas en Acapulco, entre los que hay un menor de edad. El mes pasado fue decapitado Alejandro Arcos, alcalde de Chilpancingo, la capital del Estado, a solo seis días de haber tomado posesión del cargo. En abril, asesinaron al subsecretario de Educación del Estado, Benjamín Adame y en marzo, falleció el exsuegro de la gobernadora, Joaquín Alonso Piedra, en una balacera. Más del 99% de los homicidios en Guerrero no se resuelven y no suele haber detenidos, como sucede con la matanza de 13 policías en Coyuca de Benítez, en octubre de 2023. Tampoco hubo tras el asesinato del alcalde de San Miguel Totolapan y otras 19 personas, en 2022.