Hallado el cuerpo de Carlos Aranda Burgoin, el mexicano desaparecido en Canadá
La Policía Montada de Canadá confirma que el cadáver encontrado esta semana es del hombre de 30 años, visto por última vez el pasado 7 de julio
La búsqueda de Carlos Tomás Aranda Burgoin ha llegado a su fin. La Real Policía Montada de Canadá confirmó que el cuerpo que fue hallado el pasado martes corresponde al del mexicano de 30 años, desaparecido en la Provincia de Columbia Británica desde el pasado 7 de julio, cuando había sido visto por última vez. Las autoridades canadienses anunciaron que seguirán con la autopsia “para determinar cómo, cuándo y por qué medios murió”, se lee en un comunicado.
“Ofrecemos nuestras más sinceras condole...
La búsqueda de Carlos Tomás Aranda Burgoin ha llegado a su fin. La Real Policía Montada de Canadá confirmó que el cuerpo que fue hallado el pasado martes corresponde al del mexicano de 30 años, desaparecido en la Provincia de Columbia Británica desde el pasado 7 de julio, cuando había sido visto por última vez. Las autoridades canadienses anunciaron que seguirán con la autopsia “para determinar cómo, cuándo y por qué medios murió”, se lee en un comunicado.
“Ofrecemos nuestras más sinceras condolencias a la familia y amigos del señor Aranda Burgoin”, se lee en un breve comunicado de la Policía Montada. El hallazgo del cuerpo a orillas del lago Osoyoos, en la frontera entre Estados Unidos y Canadá, dio claridad a una investigación que se extendió durante más de un mes y medio. El cadáver tenía ropa similar a la que usaba el ciudadano mexicano, del que se perdió el rastro después de haber llegado un mes antes a trabajar a Canadá.
La identificación era desafiante porque el cuerpo estaba en un grado avanzado de descomposición. “El médico forense estará realizando las pruebas correspondientes a partir de muestras de ADN para corroborar si en efecto se trata de Carlos Tomás”, comentó tras el hallazgo la Secretaría de Relaciones Exteriores de México en un comunicado conjunto con la familia del joven.
La ficha de desaparición fue publicada el pasado 10 de julio, después de que la Cancillería mexicana se pusiera en contacto con los policías de Osoyoos, una pequeña comunidad de 5.000 habitantes, a unos 400 kilómetros de Vancouver. La cónsul mexicana en esa ciudad, Berenice Díaz, insistió a las autoridades que iniciaran el operativo de búsqueda del ciudadano originario del Estado de Oaxaca. También se emitió una ficha amarilla de búsqueda de la Interpol con sus rasgos distintivos: pelo castaño, 1,75 metros, y lunares en su cuello, su mentón y la frente. “Su familia está desesperada y lo está buscando”, dijo Díaz en un video publicado hace dos semanas.
Ante la falta de respuestas sobre su paradero, un grupo de familiares de Aranda Burgoin se manifestó afuera del Palacio Nacional, la sede del Gobierno de México, a principios de agosto para pedir que Andrés Manuel López Obrador pidiera avances al primer ministro canadiense, Justin Trudeau. “Ya lleva un mes de desparecido y no tengo un informe escrito de la policía”, dijo Octavio Aranda, su padre, y criticó la actuación de las autoridades de ambos países. Tras la protesta, la familia sostuvo reuniones con la canciller Alicia Bárcena y con el embajador canadiense Graeme C. Clark para agilizar las labores de búsqueda y tener más certeza de lo sucedido.
La desaparición de Aranda Burgoin coincidió con el caso de la estudiante María Fernanda Sánchez en Alemania, hallada a principios de agosto tras estar dos semanas desaparecida. “Comprometida con el seguimiento permanente para encontrar a Carlos Tomás en Canadá”, declaró esta semana Bárcena y aseguró que informó de los avances de las pesquisas a la familia el pasado lunes. Las autoridades mexicanas señalaron que apoyarán a la familia del joven en los trámites consulares, policiales y la repatriación.
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