Motín, intento de fuga y narcobloqueos: 48 horas de terror en Zacatecas
El Estado vive un fin de semana de violencia con múltiples enfrentamientos entre cárteles y con las fuerzas de seguridad, y el asesinato de un juez
Zacatecas vivió este fin de semana 48 horas de terror. El sábado se registraron varias balaceras e incidentes. Uno de ellos fue el atentado contra el juez Roberto Elías Martínez, baleado cuando salía de su casa en el municipio de Guadalupe. Las autoridades del Tribunal Superior de Justicia confirmaron su muerte durante el domingo. Ese mismo día, por la tarde, se registró un motín y un intento de fuga en un penal cercano a Fresnillo. El hecho fue acompañado de una decena de ataques, in...
Zacatecas vivió este fin de semana 48 horas de terror. El sábado se registraron varias balaceras e incidentes. Uno de ellos fue el atentado contra el juez Roberto Elías Martínez, baleado cuando salía de su casa en el municipio de Guadalupe. Las autoridades del Tribunal Superior de Justicia confirmaron su muerte durante el domingo. Ese mismo día, por la tarde, se registró un motín y un intento de fuga en un penal cercano a Fresnillo. El hecho fue acompañado de una decena de ataques, incendio de coches y bloqueos de carreteras, que buscaban “distraer” a las fuerzas de seguridad con el fin de concretar la huida de la cárcel, de acuerdo a la versión oficial. Zacatecas vive una de las situaciones de inseguridad más complejas de todo el país y es testigo a diario de la disputa por el territorio entre los mayores cárteles de droga de México.
Sobre las siete de la tarde del domingo se registró una enorme movilización policial alrededor del penal de Cieneguillas, a una hora de la capital de la entidad. La prensa local relataba entonces que se escuchaban detonaciones de armas de fuego al interior de la cárcel y de manera simultánea se empezaron a ver ataques en al menos cinco carreteras en municipios cercanos a Fresnillo. Las imágenes difundidas por redes sociales mostraban decenas de vehículos incendiados y rutas cortadas por columnas de fuego no menores a dos metros. En algunos vídeos incluso se escuchan disparos de fondo, sirenas policiales, y se ven a las fuerzas de seguridad pasar a toda velocidad.
Gabriela Pinedo, secretaria de Gobierno del Estado, informó la noche del domingo que se había registrado un intento de motín y fuga” en el penal de Cieneguillas, pero que había sido “frustrado” por las fuerzas de seguridad. “Se tiene control del mismo; hubo distractores incendiando algunos vehículos con la intención de consumar la fuga”, publicó en su cuenta de Twitter dos horas después de comenzar la movilización a las afueras de la cárcel.
Adolfo Marín Marín, secretario de Seguridad del Estado, aseguró en un video difundido antes de la medianoche que la situación dentro de la prisión estaba controlada, pero que habían registrado varias personas heridas. El funcionario dijo además que estaban investigando las causas y condiciones en las que se dio el “intento de evasión”. “Situaciones como las de hoy que se presentaron obedecen a las condiciones del centro y a la sobrepoblación”, agregó Marín Marín. El Ejecutivo estatal, a través de diferentes portavoces, hizo un llamado al Gobierno federal a trasladar los presos que consideran más peligrosos a penales federales, que cuentan con mayores medidas de seguridad.
Algunos periodistas locales, que prefieren mantener el anonimato, relatan a este periódico que el Cartel de Sinaloa tenía un plan de fuga armado desde hace tiempo, que consistía en hacer colisionar una gran camión contra los muros de la cárcel para poder así facilitar la huida de algunos de sus miembros detenidos en ese penal. Unas fotografías muestran la tarde del domingo a ese camión, que llegó al sitio y se estrelló contra el centro penitenciario, pero no logró derribar los muros del edificio, lo que significó el primer traspié en el plan para escapar de prisión.
Más allá de este fin de semana bajo fuego, Zacatecas atraviesa una situación de inseguridad muy compleja. Hace apenas 10 días fue asesinado el coordinador de la Guardia Nacional en el Estado, el general José Silvestre Urzúa Padilla, en un operativo contra grupos del crimen organizado. La entidad es testigo cada día del cruce entre el poderoso Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que intenta desde hace un tiempo abrirse espacio en la entidad con una guerra contra el Cartel del Pacífico, con quien disputa la venta de narcóticos, principalmente de fentanilo.
Esa violencia llevó al Estado a liderar en 2021 la lista en tasa de homicidio a nivel nacional, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística. Zacatecas registró 109 asesinatos por cada 100.000 habitantes, un número muy por encima de los que registró Baja California, la segunda entidad en la lista, con una tasa de 86. También una cifra muy alta en relación con los años anteriores: Zacatecas pasó en una década a tener seis veces más homicidios. Solo el año pasado hubo 1.776 asesinatos en la entidad.
La mañana de este lunes los restos de los coches incendiados seguían bloqueando los caminos cercanos a la capital zacatecana. La ola de violencia que vivió este fin de semana el Estado norteño, gobernado por el morenista David Monreal, llegó a la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, que fue cuestionado por la estrategia de seguridad allí. “Estamos permanentemente atendiendo la situación, este fin de semana hubo estos hechos muy lamentables, el asesinato de un juez y el intento de fuga de uno de los penales. Se actuó a tiempo y no pudieron fugarse”, dijo el mandatario, que admitió que “se ha ido avanzando pero hace falta más”.
La secretaria de Seguridad federal, Rosa Icela Rodríguez, aseguró que ningún preso había escapado después del motín y que “no hubo que lamentar pérdidas de vida”. Preguntada sobre quiénes intentaron fugarse, la funcionaria señaló no podía asegurar a quién pertenecían, pero lo sucedido el domingo era una consecuencia del “alto número de detenciones que se han hecho en Zacatecas” respecto a dos grupos del narcotráfico que están en “una rencilla” entre ellos por el poder en la región. “Exactamente no le puedo decir, es de tal grupo, pero allí existen dos grandes grupos criminales que quizás hayan llegado últimamente”.
López Obrador informó que no tienen conocimiento sobre si el ataque al juez y el motín estén conectados. “El juez no tenía nada que ver directamente con la actividad criminal, sus asuntos no trataban esos temas, que son los que ponen más en riesgo la vida de las autoridades”. El presidente indicó además la investigación persigue una versión que señala que el asesinato se desata después a causa de “una declaración que él [el juez Roberto Elías Martínez] hizo sobre unos asesinatos, como ciudadano, de algo que había pasado en su colonia”.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país