“A los periodistas hay que matarlos de hambre”: el ‘audiogate’ del líder del PRI complica los planes de la oposición
Alejandro Moreno acusa a Morena de intentar dividir su alianza con el PAN y el PRD en vísperas de las elecciones estatales y presentará denuncia por las revelaciones de la gobernadora de Campeche
Unos audios atribuidos al líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que reflejan malas prácticas y contienen afirmaciones inaceptables, una ofensiva de Morena y un cruce de acusaciones que ha acabado en la Fiscalía. La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, del movimiento oficialista, lleva más de dos semanas difundiendo grabaciones del dirigente priista, ...
Unos audios atribuidos al líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que reflejan malas prácticas y contienen afirmaciones inaceptables, una ofensiva de Morena y un cruce de acusaciones que ha acabado en la Fiscalía. La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, del movimiento oficialista, lleva más de dos semanas difundiendo grabaciones del dirigente priista, Alejandro Moreno, que también encabezó la gubernatura de ese Estado hasta 2019. En la última el político, supuestamente, afirma en una conversación: “A los periodistas no hay que matarlos a balazos, papá, hay que matarlos de hambre, ya te lo dije”. Estas palabras le costaron un repudio unánime, no solo de los simpatizantes del presidente Andrés Manuel López Obrador, sino también de personalidades públicas muy críticas con el Gobierno y, en definitiva, de sus potenciales votantes.
La historia tiene todos los ingredientes de un caso de guerra política sin disimulos, cuando los cauces habituales de la confrontación saltan por los aires. Y si la concreción y las formas de las revelaciones despiertan dudas por el momento en que se producen, también siembran graves sospechas sobre la actuación de uno de los líderes de la coalición opositora. Moreno sostiene que se trata de insidias y que las declaraciones están sacadas de contexto, en el mejor de los casos, o incluso son “voces falsas”. “Han emprendido una campaña para desprestigiarme, publicando audios que a todas luces son grabaciones ilegalmente obtenidas y vilmente editadas a fin de componer frases y conversaciones que no existieron”, afirmó el martes. Esta última filtración se suma a las anteriores, en las que presuntamente exige a un colaborador que presione a un proveedor para que regale al partido 100.000 gorras, se habla de gastos millonarios o de la supuesta donación de Cinépolis a la campaña de los 12 candidatos a la Cámara de Diputados por Michoacán. Dos millones para cada aspirante. Hay incluso una conversación con un médico en la que se escucha al político ofrecerle su departamento en Campeche y su avión privado.
Estas revelaciones han acabado en un cruce de denuncias. Primero, el Instituto Nacional Electoral (INE) confirmó haber abierto una carpeta a petición de Morena y aseguró que “desplegará sus capacidades de investigación con absoluta imparcialidad y, si hay alguna conducta indebida, tomará las medidas conducentes”. Moreno, en cambio, opta por actuar por la vía de la justicia ordinaria. “Ante estas falsedades, acudiré a la Fiscalía General de la República para presentar una denuncia penal en contra de quienes están promoviendo estos actos, divulgando información falsa y mintiéndole a la ciudadanía. No nos vamos a dejar, no nos van a callar”, ha anunciado.
El caso, al margen del alcance real de las acusaciones, afecta a la imagen de una coalición -integrada además del PRI por el Partido Acción Nacional (PAN) y por el Partido de la Revolución Democrática (PRD)- ya debilitada y que aún no se ha recuperado de la derrota de 2018. En diez días se celebran elecciones en seis Estados y mientras Morena busca ampliar su poder territorial, la alianza Va por México trata de resistir y recomponerse con vistas a las presidenciales de 2024.
El líder priista acusó precisamente a Sansores de intentar romper esa plataforma. Pero esta semana ha ido más allá, apuntando directamente al Ejecutivo. “Le decimos al Gobierno que aquí está la coalición firme y sólida. No nos van a dividir, vamos con todo porque ya se dieron cuenta de que juntos vamos a ganar, vamos a transitar bien el 2022, vamos a construir el 2023 y les vamos a ganar la Presidencia de la República en 2024. Les puedo decir, por el bien del pueblo de México, que estos de Morena están moralmente derrotados”, enfatizó en conferencia de prensa, flanqueado por el dirigente panista, Marko Cortés, y el del PRD, Jesús Zambrano.
“A mí no me van a intimidar, yo no voy a salir del país, yo los voy a enfrentar aquí, con la Constitución en la mano, con firmeza, carácter y voluntad”, continuó Moreno en clara referencia a Ricardo Anaya, el excandidato presencial del PAN que decidió, tras verse implicado en el caso Odebrecht, salir de México y hoy está cada vez más alejado de los círculos de poder de su formación. “¿Con qué intención hace Morena este montaje? Sencillo, buscan dividirnos como bloque opositor, quieren enfrentarnos con los medios de comunicación y con la ciudadanía”, insistió en un mensaje publicado en Twitter.
Su argumento es que “si los audios presentados por la gobernadora de Campeche tuvieran un ápice de veracidad, hubiera acudido a las instancias a presentar una denuncia” en lugar de hacerlo en su programa de televisión semanal, Martes del jaguar, o en las redes sociales. En su opinión la ofensiva es una venganza por el rechazo de su formación a la reforma eléctrica, una apuesta personal del mandatario que naufragó en el Congreso pese a que la bancada oficialista trató durante meses de presionar a la oposición apelando a las esencias del PRI de antaño.
Las acusaciones de Sansores se encuadran en la denuncia de algunas dinámicas corruptas de la política de México, en línea con el discurso de López Obrador. “¡Les roba a los pobres y también les saca a los ricos! Tiene llenos los bolsillos y aún así dice que el dinero es muy poco...”; “a nosotros nos dejaron en la ruina, pero ellos viajaban en aviones privados gastando millones a costa del pueblo”, “grábenselo, compañeros periodistas, para que se den cuenta del verdadero valor que tienen [ustedes] para él”. Son algunas de las frases que la gobernadora ha dedicado a su rival en las redes sociales.
El presidente no se ha querido pronunciar sobre el caso. Al menos por el momento. “Pues, lo mejor es no meternos... Además, estamos, en efecto, en víspera de elecciones en seis Estados y hay pasiones que se desbordan, por decirlo amablemente. Entonces, no responder nosotros a este tipo de cuestionamientos, no meternos, y sí tenerle confianza a la gente, los ciudadanos saben qué es cierto, qué no es, ya la gente está muy consciente, muy avispada, no se dejan manipular”, ha afirmado en la conferencia de prensa matutina de este miércoles antes de agregar: “Solo decir que nosotros no perseguimos a nadie. Sí tenemos adversarios, pero no enemigos, y tenemos adversarios que pensamos vencer en buena lid, no estamos pensando en destruir a enemigos, no odiamos, y tenemos que ganar con argumentos, con la razón”.
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