La Fiscalía mexicana detiene al presunto responsable de las construcciones ilegales en Teotihuacan
René Monterrubio, expresidente municipal de San Juan Teotihuacan, ha sido arrestado por la Fiscalía General de la República por daños a una de las joyas arqueológicas más importantes de México
Ya hay un responsable de la construcción que amenaza los vestigios de Teotihuacan, joya de la arqueología mexicana. La Fiscalía General de la República (FGR) ha detenido a René Monterrubio, expresidente municipal de San Juan Teotihuacan y jefe de la policía de Ciudad de México en la década de los noventa, por la “probable responsabilidad de daños a sitios arqueológicos”, un delito que viola la Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Ar...
Ya hay un responsable de la construcción que amenaza los vestigios de Teotihuacan, joya de la arqueología mexicana. La Fiscalía General de la República (FGR) ha detenido a René Monterrubio, expresidente municipal de San Juan Teotihuacan y jefe de la policía de Ciudad de México en la década de los noventa, por la “probable responsabilidad de daños a sitios arqueológicos”, un delito que viola la Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, anunció este miércoles la propia Fiscalía.
A pocos metros de las pirámides de Teotihuacan, decenas de albañiles trabajaban desde febrero en una obra con maquinaria pesada. Una barda enorme sigue ocultando el predio de siete hectáreas, parte de la zona arqueológica, que finalmente fue asegurada a finales de mayo con la ayuda de 250 elementos de la Guardia Nacional, 60 de la Policía Ministerial y peritos especializados, luego de meses de denuncias de vecinos, arqueólogos y especialistas. La ‘ciudad de los dioses’ corría incluso el riesgo de perder la declaratoria de Patrimonio Mundial, la prestigiosa lista de la Unesco, si las autoridades no tomaban cartas en el asunto.
Finalmente, este lunes 11 de octubre la Fiscalía Especializada de Control Competencial cumplimentó la orden de aprehensión en contra de René “M”, tras una “denuncia telefónica” que revelaba la existencia del predio, ubicado en Teotihuacán, Estado de México, en el área ampliada de monumentos arqueológicos, donde personas realizaban “obras de excavación y remoción de suelo, subsuelo y gruta-cueva, con maquinaria pesada”, dice la FGR en un comunicado. Personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) acudió al inmueble, donde fueron atendidos por René Monterrubio, quien “de palabra manifestó ser el responsable del predio sin acreditarlo mediante algún documento, y sin contar con las autorizaciones de las obras que estaban realizando”. El director del Instituto de Antropología e Historia, Diego Prieto, afirmó en su momento que las afectaciones a la zona arqueológica de Teotihuacan superan el valor de los predios en donde se realizaban obras y el terreno podría ser “objeto de expropiación”.
Protegida desde 1988 por decreto presidencial, la Zona Arqueológica de Teotihuacan (ZAT) es una de las más extensas de México, aspecto que complica su resguardo. Eso explica que un grupo de operarios construyera una barda alrededor del predio e introdujera maquinaria pesada sin demasiados problemas. Las autoridades y arqueólogos estaban preocupados por la posible construcción de algún centro recreativo. No en vano, una de las promesas de campaña que hizo en su día René Monterrubio fue colocar una gran noria en la zona. El INAH ya había recibido alguna solicitud para su construcción cuando el político era alcalde, pero le fue negado el permiso por ir en contra de los lineamientos de la Unesco al declarar la zona patrimonio mundial.
El juez de distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio, del Centro de Justicia Penal Federal, libró orden de aprehensión en contra de René Monterrubio misma que fue cumplimentada por los agentes de la Policía Federal Ministerial, en Teotihuacán, quedando a disposición del Centro de Justicia Penal Federal, en Nezahualcóyotl, Estado de México. En la audiencia de imputación, la jueza impuso a René Monterrubio la presentación periódica ante la Unidad de Medidas cautelares; tiene prohibido salir del país y está obligado a presentar un informe en el que señale el domicilio donde va a residir y una garantía económica.
Teotihuacan, en riesgo de perder declaratoria de Patrimonio Mundial
Teotihuacan, el complejo arquitectónico más visitado de México, corre el riesgo de salir de la prestigiosa lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. Las numerosas construcciones ilegales en la zona, la presión urbana y la oferta turística irregular está dañando el patrimonio y pone en peligro el carácter e identidad del sitio, advierten arqueólogos, expertos y la propia Unesco, que ha pedido al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) información sobre el estado de la zona arqueológica, patrimonio de la humanidad desde 1987.
Se trata de una primera llamada de atención del organismo especializado de las Naciones Unidas al Gobierno mexicano, luego de la noticia de que, a pocos metros de las icónicas pirámides del Sol y la Luna se encontraba una enorme construcción ilegal de siete hectáreas que ha dañado no solo los vestigios que se encuentran a flor de tierra de la joya arqueológica mexicana, también el paisaje que los teotihuacanos imitaron excepcionalmente en sus basamentos piramidales, una de los criterios por los que esta zona arqueológica fue nombrada patrimonio de la humanidad.
La obra ha sido asegurada y el responsable ha sido detenido, pero aquella construcción ilegal, ubicada en la zona de Oztoyahualco, no es la única. El 40% del Valle de Teotihuacan cuenta con construcciones, alarman arqueólogos y expertos consultados por EL PAÍS. El INAH ha interpuesto una docena de denuncias por obras irregulares, no todas del tamaño de las parcelas 23 y 19, donde se presumía la edificación de algún centro recreativo, otras son casas o drenaje que han colocado los pobladores del lugar sin apenas permisos. Este caos, que se explica por la corrupción, el abandono de las autoridades, el recorte presupuestal a las instituciones culturales y la falta de un plan para el desarrollo económico y social de la zona, no es el único que ha sufrido el lugar, en 2004 Walmart construyó una tienda que opera hasta la fecha, a pesar de los escándalos de corrupción alrededor del caso.
Con la pandemia del coronavirus se aceleraron los procesos de deterioro social y presión urbana en el Valle de Teotihuacan, afirma el director del complejo histórico a este diario, Rogelio Rivero: “Lo que teníamos pensado que iba a ocurrir en cinco años, pasó en seis meses, con el cierre de la zona arqueológica y el freno a la actividad económica”. La zona arqueológica más visitada en México es Teotihuacán. De acuerdo con las estadísticas de Datatur, la ciudad prehispánica de Teotihuacán recibió 3.145.384 visitantes en 2019, de los cuales 2.534.224 eran turistas nacionales y 611.160 extranjeros. Pero en 2020, debido a la pandemia, el porcentaje de visitas cayó más del 80%, pues fue visitado por 574.484 personas, y en lo que va del 2021 se ha registrado la visita de apenas 93.372, de los cuales 66.869 eran turistas nacionales y 26.503 extranjeros. El primer sitio del país declarado patrimonio mundial sufre una debacle económica desde hace meses. “Así como está la sociedad alrededor de Teotihuacan, así como estamos al día de hoy, Teotihuacan no tendría viabilidad en los próximos 10 o 20 años. Si no entendemos qué hacer para componer el desorden que hay, no tenemos futuro”, advierte el arqueólogo.
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