No lo ven (no hay ninguna mujer)

Doce dirigentes opositores en México escenifican una alianza exhibiendo una fotografía de su reunión sin ninguna mujer

Reunión de la oposición de México, con los presidentes del PRI, el PAN y el PRD.RRSS

Doce hombres alrededor de una gran mesa. A sus espaldas, las pantallas exhiben el mensaje que reunió a estos dirigentes políticos y exponentes de organizaciones de la sociedad civil en la sede del Partido Revolucionario Institucional (PRI): “Va por México”. Esto es, el nombre de la coalición opositora que ha decidido reafirmar su alianza frente a Morena haciendo alarde de pluralismo ideológico y programático. Pero ahí se acaba la diversidad. En la fotografía, ampliament...

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Doce hombres alrededor de una gran mesa. A sus espaldas, las pantallas exhiben el mensaje que reunió a estos dirigentes políticos y exponentes de organizaciones de la sociedad civil en la sede del Partido Revolucionario Institucional (PRI): “Va por México”. Esto es, el nombre de la coalición opositora que ha decidido reafirmar su alianza frente a Morena haciendo alarde de pluralismo ideológico y programático. Pero ahí se acaba la diversidad. En la fotografía, ampliamente difundida en las redes sociales por varios de los protagonistas, no hay ninguna mujer. Las críticas no tardaron en poner en evidencia el absoluto dislate. Lo que encierra la imagen nos habla de machismo en política, pero también ilustra lo que los políticos creen que la sociedad ve y lo que ellos mismos no ven.

Detrás de esa instantánea, que no fue improvisada sino que tiene un propósito promocional, no hay solo una reunión en la que no participa una sola mujer. Esto, por supuesto, es lo más relevante. Sin embargo, también resulta significativa la normalidad con la que doce hombres se reúnen, hablan de un proyecto que pretende representar a amplios sectores de la población mexicana, se hacen una foto y la difunden. No perciben el ruido. Esa normalización es aún más escandalosa cuando tanto la Cámara de Diputados como el Senado tienen, sobre el papel, una composición paritaria en la que, pese a ello, las mujeres chocan con una exclusión estructural de la primera línea.

En la instantánea aparecen los líderes del PRI, del PAN, del PRD, sus coordinadores parlamentarios y figuras públicas como Claudio X. González y Gustavo de Hoyos. Decidieron citarse para hablar de agenda legislativa con vistas a las elecciones presidenciales de 2024. Esos comicios son el horizonte que va a determinar el debate político en los próximos años. Ya se han desatado las especulaciones sobre candidaturas y, de momento, entre los nombres que más suenan solo hay una mujer, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, la dirigente con más poder en México y posible aspirante de Morena.

El machismo o la “misoginia”, como afirmó Olga Sánchez Cordero en una entrevista con EL PAÍS, abarcan todo el espectro ideológico. Según la exsecretaria de Gobernación y actual presidenta del Senado, también existen en el Gabinete de Andrés Manuel López Obrador. El presidente recibió una avalancha de críticas por su reacción ante las movilizaciones del 8 de marzo. Llegó a acusar al movimiento feminista de intentar debilitarle con intereses espurios. Entonces, varios representantes de la oposición se revolvieron contra el Gobierno enarbolando la bandera de la igualdad. Pero ahora es la oposición la que se ha retratado, o al menos lo han hecho sus dirigentes. Tres formaciones prácticamente desarticuladas desde 2018 y sin liderazgos con proyección. Doce hombres en la foto. Eso es parte de su problema político.

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