Concluye la cuarta etapa de búsqueda del activista Vicente Suástegui sin rastro de su paradero
Amnistía Internacional reclama la aparición con vida del militante, defiende su “labor de defensa de los derechos humanos” y señala que “actores estatales podrían estar involucrados”
La cuarta etapa de búsqueda de Vicente Suástegui, el activista medioambiental al que tres hombres armados se llevaron a la fuerza el pasado 5 de agosto, ha concluido este viernes sin rastro de su paradero. A pesar de que el militante lleva más de un mes desaparecido, Marco Antonio Suástegui, su hermano, ha asegurado que todavía confía en que Vicente aparezca sano y salvo: “Sentimos mucha tristeza, mucha desesperación, a veces mucho desconsuelo y desánimo, pero también no encontrarlo sepultado nos da la esperanza y aumenta nuestra fe de que Vicente esté vivo”.
A Suástegui, de 37 años, lo...
La cuarta etapa de búsqueda de Vicente Suástegui, el activista medioambiental al que tres hombres armados se llevaron a la fuerza el pasado 5 de agosto, ha concluido este viernes sin rastro de su paradero. A pesar de que el militante lleva más de un mes desaparecido, Marco Antonio Suástegui, su hermano, ha asegurado que todavía confía en que Vicente aparezca sano y salvo: “Sentimos mucha tristeza, mucha desesperación, a veces mucho desconsuelo y desánimo, pero también no encontrarlo sepultado nos da la esperanza y aumenta nuestra fe de que Vicente esté vivo”.
A Suástegui, de 37 años, lo raptaron por ser una de las principales figuras públicas del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa La Parota (Cecop), según Marco Antonio Suástegui, que también es el principal dirigente de la asociación. El Cecop, una organización de base campesina e indígena creada en 2003, lucha para detener la construcción de un macroproyecto hidroeléctrico en el río Papagayo (Guerrero), que afectaría a 24 comunidades indígenas, cinco municipios y desplazaría a más de 25.000 personas, según un informe del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan.
Amnistía Internacional, en una carta a la que este diario ha tenido acceso dirigida a Zuriel de los Santos, Fiscal General del Estado de Guerrero, ha exigido que se “realicen acciones urgentes” para encontrar con vida a Suástegui; se garantice una investigación imparcial y exhaustiva y se haga un “análisis contextual que considere la labor de defensa de los derechos humanos que realiza Vicente Suástegui”. La organización también ha mostrado su preocupación a que “actores estatales puedan estar involucrados”, y ha denunciado que tanto el activista como su hermano Marco Antonio han sufrido “una persecución política que ha pretendido mermar su actividad organizada para proteger el territorio del río Papagayo e impedir la construcción de la presa”.
Varias ONG y la FIDH, una federación de 192 organizaciones de defensa de los derechos humanos, ya había exigido con anterioridad a las autoridades tomar medidas en el asunto para garantizar la aparición con vida de Vicente Suástegui.
Marco Antonio Suástegui ha declarado que, de nuevo, durante esta etapa de la búsqueda han sufrido amenazas y presiones por parte de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), un grupo de autodefensa comunitario de la zona. La etapa anterior ya terminó en un clima de tensión, después de que el equipo de búsqueda fuera recibido por un bloqueo en el poblado de El Arenal, motivado por la UPOEG.
Según afirman Marco Antonio Suástegui y Abel Barrera, director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, hay indicios en los testimonios de la única persona detenida hasta el momento, Juan Carlos N., alias El Brillo, que indican que Vicente Suástegui fue secuestrado por Pedro Santos Cruz, alias el comandante Pino, uno de los líderes de la UPOEG, y que este tendría retenido al activista en algún punto de las inmediaciones de El Arenal. “Jurídicamente, entendemos que hay elementos que lo incriminan, y también contra otra persona que trabajó como policía ministerial en Acapulco y colaboró en la desaparición”, declaró Barrera en entrevista con EL PAÍS.
“La búsqueda que nosotros hemos emprendido no solamente es por Vicente, se tiene que buscar a todas las víctimas y personas secuestradas por la UPOEG. Queremos demostrar con hechos que no estamos hablando sin fundamento, que es un secreto a voces que la UPOEG mata, secuestra, asesina, viola, desaparece y tortura a la gente, y esto no lo hacen solos, lo hacen en complicidad con las autoridades del estado”, ha recalcado Marco Antonio Suástegui.
Familiares y amigos de Suástegui han presentado también una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado de Guerrero contra Pedro Santos Cruz, Baltazar Cardona Clavel, Fernando N. y otros miembros de un grupo criminal conocido como “Los Rusos”, según El Sur de Acapulco.
Esta etapa de búsqueda, que comenzó el martes, ha constado de cuatro días, igual que las tres anteriores. La expedición, integrada por miembros del Cecop, la Guardia Nacional, el Ejército, la Comisión Estatal de Búsqueda, la Fiscalía del Estado de Guerrero, la Unidad Canina Federal y Estatal y dos organizaciones sociales, comenzó la semana indagando en los alrededores de la comunidad del Bejuco, cerca de El Arenal. Este viernes no ha podido realizar su labor debido a que las lluvias de los últimos días han hecho impracticables los caminos y los vehículos no han podido acceder. Han tenido incluso que contratar una retroexcavadora para sacar uno de los vehículos.
La búsqueda se reanudará el martes de la semana que viene. Para esta nueva etapa, han solicitado a la Secretaría de Marina, a través de la Comisión Nacional de Búsqueda, la colaboración de lanchas y vehículos anfibios, además de un equipo de buzos. La metodología de trabajo que emplea el equipo consiste en intercalar cuatro jornadas de rastreo sobre el terreno con días de investigación, donde vuelven a consultar fuentes y testimonios que les ayuden a decidir por qué zona continuar con las pesquisas.
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