El peritaje apunta a que fallos en la construcción provocaron la tragedia de la Línea 12 del metro
El informe preliminar de ingeniería forense detalla deficiencias en la obra civil, principalmente en los pernos y las soldaduras
La tragedia de la Línea 12 del metro de Ciudad de México fue provocada por “una falla estructural” en la construcción con intervenciones ajenas al diseño de los planos. Eso concluye el primer peritaje preliminar de la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV), presentado este miércoles por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, junto con los representantes de la compañía. El informe de ingeniería forense señala deficiencias en la edificación de la obra, principalmente con los pernos y las soldaduras que sostenían ...
La tragedia de la Línea 12 del metro de Ciudad de México fue provocada por “una falla estructural” en la construcción con intervenciones ajenas al diseño de los planos. Eso concluye el primer peritaje preliminar de la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV), presentado este miércoles por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, junto con los representantes de la compañía. El informe de ingeniería forense señala deficiencias en la edificación de la obra, principalmente con los pernos y las soldaduras que sostenían el puente, como la causa preliminar del colapso de un tramo elevado, en el que murieron 26 personas y decenas más resultaron heridas el pasado 3 de mayo. El resultado del peritaje salpica a la gestión del Gobierno de la ciudad durante el mandato del actual canciller, Marcelo Ebrard, cuando se construyó esa línea. “Respaldo la realización de las indagatorias periciales y técnicas que sean necesarias para determinar las causas del accidente y deslindar las responsabilidades a las que haya lugar”, ha respondido el secretario de Exteriores, en un comunicado.
Las deficiencias estructurales halladas por la empresa noruega son fallas en la soldadura de los pernos, un problema en la porosidad y falta de fusión en la unión entre los pernos y las trabes, falta de pernos en las trabes que sostenían el puente y de equidistancia entre pernos, el uso de diferentes concretos, soldaduras mal realizadas o no concluidas y una falla con las soldaduras en filete, las realizadas en las esquinas que forman la unión de dos materiales. Así como “materiales ajenos” al diseño inicial de la obra y “fallas en los recubrimientos”. DNV ha señalado además que registraron deformaciones y desplazamientos de las vigas y trabes previos al derrumbe. El de este miércoles es el primero de tres dictámenes que se han solicitado para esclarecer los hechos. El documento, que elaboraron 16 expertos de cinco países, será incluido en el expediente judicial que ha abierto la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México para investigar las responsabilidades.
“Una trabe se venció en el momento en el que iba pasando el tren”, había dicho la jefa de Gobierno de la capital mexicana, Claudia Sheinbaum, desde el lugar del suceso un par de horas después del derrumbe. Han pasado seis semanas hasta tener una primera respuesta de por qué se desplomó ese tramo de la Línea 12, la más nueva y costosa del metro de la capital mexicana. Los dictámenes que aún faltan incluyen una indagatoria sobre las causas inmediatas del desplome de esa trabe y un análisis técnico para detectar fallas sistémicas a atender para evitar que el colapso se repita. La investigación se enfocará en adelante en saber si el diseño de la obra y los materiales que se usaron fueron apropiados, y si la construcción cumplió con lo establecido por el diseño. “Todas las decisiones sobre trazo, diseño, construcción y supervisión de la Línea fueron tomadas bajo criterios de eficiencia y conveniencia técnica, de manera colegiada, por las entidades referidas”, ha dicho Ebrard en referencia a más de un centenar de técnicos que participaron de la construcción.
“No hay duda de que hubo una mala calidad constructiva”, señala Francisco García Álvarez, expresidente de la Asociación Mexicana de Ingeniería Estructural y agrega que los resultados apuntan a que “hubo muchos responsables” que tendrán que responder por lo sucedido. “No solamente es la construcción, no solamente se apresuró la obra... hubo una mala supervisión, una mala instalación, una mala ejecución y también es posible que haya habido falta de mantenimiento”, comenta el ingeniero estructural.
“Tenemos que esperar a que se terminen todos los dictámenes”, insiste García Álvarez. Los siguientes informes, el de la fase 2 y la fase 3, se detendrán en las reparaciones que se hicieron en esa línea de metro tras el temblor de 2017 y en posteriores mantenimientos. El segundo se presentará el 14 de julio y el tercero el 30 de agosto.
En la sede de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, donde se ha presentado el dictamen preliminar, lo más notable ha sido la ausencia de la directora del metro, Florencia Serranía, en la presentación. Después de una mañana marcada por las filtraciones y la discusión de las posibles implicaciones políticas, la decisión del Gobierno fue no admitir preguntas de los medios de comunicación y enfocarse en los aspectos técnicos. Mientras se hacía la entrega formal de tres carpetas con el informe de ingeniería forense, Sheinbaum tomaba uno de los tomos, se ponía sus lentes y ojeaba el documento. A su izquierda comentaba un par de apuntes con la secretaria de Protección Civil, tapando el micrófono para que no lo escucharan los reporteros, poco antes de insistir que se trataba de “un informe preliminar” y “un primer dictamen”.
La tragedia atraviesa a los tres últimos Gobiernos de la capital. La llamada Línea Dorada se construyó en el mandato de Marcelo Ebrard (2006-2012). Fue suspendida por más de un año por problemas electromecánicos durante la gestión del ahora senador opositor Miguel Ángel Mancera (2012-2018), que también encabezó las reparaciones tras el terremoto de 2017. Al frente, desde 2018, está Claudia Sheinbaum, que en dos años y medio ha enfrentado un choque de trenes, un incendio en un puesto de control y el desplome de la Línea 12.
“Castigo a los responsables”, sentenció López Obrador horas antes de la presentación del peritaje, cuando aún no era público el informe que apunta contra la construcción. El presidente reclamó que se utilice la tragedia para generar división en su partido. “Nuestros adversarios se han lanzado con todo en este caso”, dijo. El mandatario insistió además en la necesidad de reabrir la Línea 12, que conecta algunas de las zonas más alejadas y humildes del sureste de la capital. “Dependientemente de la cuestión judicial, vamos a ayudar porque lo que queremos es que los pobladores tengan ese servicio”.
Fue Jesús Esteva Medina, secretario de Obras, el encargado de leer los resultados de la investigación en la presentación de este miércoles. “El incidente fue provocado por una falla estructural”, ha sentenciado. Instantes más tarde, la jefa de Gobierno tomó el podio y leyó un comunicado en el que prometió que ninguna víctima “quedará en el desamparo”, que la verdad sobre la tragedia se dará a conocer sin restricciones y que se buscará la reapertura de la Línea 12 con la garantía de “no repetición” de un incidente similar. Sheinbaum ha anunciado además que un grupo de ingenieros especialistas efectuará un proyecto ejecutivo para reforzar la línea, previsto para hacerse público en un mes, y un diálogo en marcha con el consorcio constructor, uno de los principales señalados por las conclusiones de DNV.
Tras la presentación del peritaje, Miguel Ángel Mancera dio una conferencia de prensa desde el Senado para referirse a los resultados de la investigación. ”Seguimos atentos, vamos a esperar a que concluya. Lo que mi Administración realizó en cuanto a trabajos, tareas, operaciones del día a día, está ahí y se puede revisar”, ha dicho y ha destacado que el trabajo de la empresa noruega está realizado “sin ninguna carga política”. Marcelo Ebrard, por su parte, ha emitido un comunicado en el que detalla los pasos del proceso de construcción de la obra y ha asegurado que se levantó con la ayuda de “lo mejor de la ingeniería mexicana”. “Esclarecer las causas del accidente requerirá, además de la presentación de un informe final de la investigación técnica, una indagatoria que revise todo el proceso de toma de decisiones en el diseño, trazo, supervisión y mantenimiento de la obra, así como los numerosos informes que la han revisado en los últimos años”, ha agregado.
El tramo siniestrado fue construido por Grupo Carso, del magnate Carlos Slim, el hombre más rico del país. Carso ganó el contrato para construir el tramo dos del Tren Maya (que atraviesa más de 200 kilómetros en el Estado de Campeche), uno de los proyectos insignia del Gobierno de López Obrador. ICA, también parte del consorcio que levantó la Línea 12, construye por adjudicación directa el tramo más largo de la nueva obra, más de 250 kilómetros, entre Izamal (Yucatán) y Cancún. La inversión para el proyecto, que contempla ocho tramos, ronda los 6.300 millones de dólares, según las autoridades.
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