Nuevo presidente de la Generalitat
Artur Mas fue investido ayer cómodamente presidente de la Generalitat de Cataluña con los votos de Convergència i Unió (CiU) y la abstención del Partit dels Socialistes (PSC). Ambos partidos firmaron pomposamente un "acuerdo de investidura" por el que el PSC pasa a ser socio preferente de los nacionalistas a cambio de ocupar un papel central en los grandes asuntos de la legislatura.
No lo van a tocar. Convergència i Unió defiende con vehemencia el modelo de inmersión lingüística de Cataluña y sus líderes, incluido el ya presidente de la Generalitat, Artur Mas, ni pestañean cuando aseguran que lo mantendrán.
Los grupos parlamentarios del Congreso han sido seriamente amonestados por el Tribunal Constitucional, que les acusa de no respetar la Constitución. Esta crítica severa responde al enojo del alto tribunal por el bloqueo en la renovación de ocho magistrados de la institución por las discrepancias entre el PSOE y el PP.
LOS PAPELES DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO
El Ministerio de Industria cerró ayer el plazo para concurrir a un concurso para construir una planta termosolar de I+D de 50 megavatios. El proyecto es enorme (cada planta cuesta unos 300 millones de euros), pero el plazo para presentarse ha sido de solo 20 días.
El refuerzo de la mujer en el sistema de pensiones constituye una de las principales novedades del acuerdo del Pacto de Toledo. El texto, cerrado a última hora del jueves, incluye por primera vez un apartado específico sobre mujeres para aumentar sus derechos para percibir pensión.
La presunta apuesta de la izquierda abertzale por las vías políticas en exclusiva no ha convencido a la sociedad vasca. Más de la mitad de los ciudadanos, el 53%, percibe "poca o ninguna voluntad" en el entorno de Batasuna por integrarse en el sistema democrático, según los datos del último estudio sobre la opinión pública de la comunidad autónoma, el denominado Euskobarómetro, que ayer se presentó en Bilbao.
El juez Baltasar Garzón aprovechó ayer la última edición de Hoy, el programa de Iñaki Gabilondo en CNN+, para anunciar que se siente víctima de una cacería por parte del Tribunal Supremo. Con la tranquilidad del que se sabe condenado de antemano, denunció que su esposa y una hija también han sido investigadas.