Barómetro de clima social de junio
Los planetas se han alineado hasta dejar en penumbra el panorama de España: crisis económica, crisis política, pesimismo ciudadano creciente, falta de liderazgo, desconfianza en el Gobierno, rechazo a la oposición, falta de acuerdos básicos entre los partidos y deterioro de la paz social.
La brecha entre el PP y el PSOE se ha consolidado y hasta se ha ampliado ligeramente. Ya son 10,5 los puntos de diferencia, no tanto a consecuencia de la subida de los populares como del desplome de la estimación de voto del PSOE. La última encuesta de Metroscopia mostraba ya una ventaja de nueve puntos, en plena efervescencia por el anuncio del plan de recorte del sueldo de los funcionarios.
La coyuntura del Gobierno
Hace un mes y medio, Zapatero tenía las cosas aparentemente claras sobre al rumbo a seguir y no parecía apesadumbrado por la situación. El presidente defendía convencido que no había que acelerar la reducción del déficit para evitar otra recaída en la recuperación económica, y tampoco había que cambiar a los ministros, porque todos estaban concienciados de la necesidad de aplicar austeridad.
Los barones del PSOE y su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, han intercambiado abiertamente sus ideas en dos reuniones recientes. En la ejecutiva del pasado lunes, Zapatero dejó claro que ahora debe primar "la estabilidad política e institucional", por lo que todos entendieron que no habrá ni cambio de gobierno ni, por supuesto, adelanto electoral.
FRANCESC VALLS / MIQUEL NOGUER | Barcelona
El PP tiene desde hace días un escrito de la Fiscalía General del Estado que responde a sus reiteradas peticiones para que se investigue si el presidente del Congreso, José Bono, incrementó su patrimonio de manera irregular. La fiscalía contesta a Mariano Rajoy que las "insinuaciones de terceros" sobre el aumento de su patrimonio son "insuficientes para someter a una persona a una investigación penal".
Se esperaba un acto puramente protocolario y acabó en rifirrafe. El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, acudió ayer por la mañana al Senado, donde se celebraba la 68 reunión interparlamentaria entre la Unión Europea y EE UU. En total, una veintena de eurodiputados y ocho congresistas.
"Gracias a Dios", espetó Sidi Ould Sidina, de 22 años, cuando el pasado 25 de mayo el Tribunal Penal de Nuakchot (Mauritania) le comunicó que acababa de ser condenado a muerte. Su compañero Maroof Ould Haiba, de 28, miró a los jueces y les rogó: "Si me vais a matar, os pido que lo hagáis con un arma de fuego".