El Sónar encumbra a Björk a la categoría de reina del festival
El Sónar ya tiene reina. Si el rey se llama Jeff Mills, desde la madrugada de ayer la soberana es Björk. Su actuación la encumbró en un trono ubicado en el enorme hangar que es el escenario SónarClub. En apenas una hora y 20 minutos, y con sólo 18 canciones, la cantante islandesa, convertida en estrella de masas (22.000 personas, en el recinto), esgrimió sus argumentos en un espacio que no resultaba precisamente idóneo para su música.