El huracán Van Morrison arrasa
MIQUEL JURADO | Vitoria
Salió el sol en Vitoria, la noticia se comentó ampliamente, las prendas de abrigo volvieron al ropero y Mendizorrotza se puso al rojo vivo. Por la noche, el causante de la oleada de calor fue un pequeño y malencarado irlandés escudado tras sus gafas de sol, con el sombrero calado hasta las cejas y un cierto aire de yo pasaba por aquí.