Las fusiones necesitarán autorización previa y se pone freno a los oligopolios de la energía
El Consejo de Ministros aprobó ayer su "voluminoso" paquete de medidas "para consolidar el crecimiento y la creación de empleo", según lo definió ayer el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato. No se trata de medidas de choque contra la inflación, como las adoptadas el pasado año, sino de "hacer un traje más grande para la economía española".El abanico es muy amplio.
El plan lanzado ayer por el Gobierno busca impedir una mayor expansión de las grandes compañías que ya dominan el sector energético. Impide a Repsol y Cepsa contruir nuevas gasolineras por un plazo de cinco y tres años, respectivamente. El usuario podrá elegir el proveedor de electricidad y gas que más le convenga a partir de 2003. Se limita la participación de las grandes petroleras en la distribución mayorista, la generación de energía de las eléctricas y la cuota de mercado de las empresas de gas. El Gobierno establece además una reducción de hasta un 9% de las tarifas eléctricas en tres años.