"He visto trozos de cuerpos humanos volando por el aire", aseguró ayer un tendero del mercado popular de Majané Yejuda, en pleno centro de Jerusalén, donde a la una y media de la tarde (las doce y media, hora española) dos suicidas palestinos de Hamás hicieron estallar dos bombas, que mataron a 14 personas e hirieron a otras 150. El atentado llevó al primer ministro, Benjamín Netanyahu, a suspender las negociaciones de paz con la Autoridad Palestina.
La frágil unidad alcanzada por los partidos democráticos tras el asesinato del concejal Miguel Angel Blanco quedó ayer de nuevo en entredicho. Las declaraciones realizadas el martes por el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en las que se oponía al aislamiento de HB y no descartaba fórmulas de diálogo con ETA, recibieron ayer una contundente respuesta del PP.
El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, declaró ayer ante una comisión del Parlamento que el Gobierno no va a cambiar la ley digital, pese a la exigencia de la Comisión Europea.
El juez Baltasar Garzón paró ayer los pies a su compañero Javier Gómez de Liaño, que había insinuado el día anterior ocultas intenciones en Garzón.